El gravísimo movimiento sedicioso iniciado en Barcelona hace unos días está prácticamente controlado por el Ejército.

Las noticias, autorizadas por la censura, señalan que las tropas leales al Gobierno han controlado todos los barrios de la ciudad y las posiciones de los sediciosos han sido batidas en toda regla.

Los rebeldes han estado incendiado la ciudad durante varios días y han ardido numerosos templos y conventos de monjas (en la foto). Los daños son cuantiosos y todavía pueden verse columnas de humo en muchos puntos de Barcelona. Por la ciudad ya no se oyen los tiroteos de días pasados, aunque todo está paralizado y sin que las fábricas hayan vuelto a la normalidad.

Ayer comenzaron a abrir algunos comercios, mientras que los cónsules han estado reunidos y han obtenido del capitán general toda clase de garantías. Algunos buques de la escuadra entraron ayer en el puerto de Barcelona.

El capitán general ha publicado un bando permitiendo la circulación por las calle sin formar grupos.