Los vecinos de los bloques que forman las 'Mil viviendas' de la barriada de la Paz denunciaron ayer la degradación en que se encuentran los edificios. El Ayuntamiento les ha enviado una carta para que procedan al arreglo de las viviendas. El problema radica en la situación jurídica de muchas de estas casas. Algunas han pasado a ser propiedad de sus ocupantes, pero otras pertenecen a la Junta de Andalucía, como última heredera del sindicato vertical. Algunos vecinos, incluso, no pagan el alquiler de las viviendas desde hace años. 

Obispo. El prelado de la diócesis de Cádiz, Antonio Dorado Soto, ha realizado una llamada a la solidaridad con los pobres, en una pastoral en la que aboga por un 'salario ciudadano'.