Con extraordinaria animación transcurrió la noche de fin de año en nuestra ciudad, contribuyendo a ello la buena temperatura. Numerosas fueron las familias que se reunieron para cenar en el Hotel Atlántico, Balneario de la Palma, restaurante El Anteojo, cafetería Miami, o la Casa Dorada. Como viene siendo costumbre, en todas las fiestas se tomaron las doce uvas al llegar el año nuevo. Como dato curioso, durante el cambio de año solamente había un buque en el puerto, que hizo sonar repetidamente la sirena.

Funcionarios municipales. Como ya es tradicional, los funcionarios municipales celebraron un almuerzo de hermandad para celebrar el fin de año. En esta ocasión celebraron la comida en el Hotel Atlántico, bajo la presidencia del secretario, Rogelio Hernández.