Con gran solemnidad, en todas las ciudades de España se celebró ayer el Día del Caudillo. En nuestra ciudad los actos comenzaron a las diez y media de la mañana con una misa solemne en la iglesia de Santo Domingo, a la que asistieron todas las autoridades. Posteriormente tuvo lugar una recepción oficial en el salón regio de la Diputación.

Presidió el gobernador civil, Daniel Arriaza. Finalizada la recepción las autoridades se colocaron en el balcón principal del edificio para presenciar el desfile de las tropas. A las dos en punto de la tarde las emisoras de radio suspendieron las emisiones para dar lectura al último parte de guerra firmado por el Generalísimo. La ciudad estuvo engalanada luciendo colgaduras casi todos los edificios.