Vuelve a subir el paro y lo hace con fuerza, en un anticipo del otoño. Es cierto que, por la estacionalidad, agosto suele ser un mes destructor de empleo, y ese fue el argumento del Gobierno para quitar hierro. Sin embargo, el dato frío del Ministerio de Trabajo afirma que el pasado mes hubo en España 84.985 personas más inscritas en las oficinas de empleo, un 2,40% más que en julio. En total, 3.629.080. Se acabó el respiro que supusieron las caídas en los últimos tres meses.

Y aunque la estacionalidad influye y hay 50.000 parados más por este efecto, no es el único motivo del repunte. Si no, no se explicaría que el mes pasado fuera el peor desde 1996 -fecha de inicio de la serie estadística del Ministerio- si exceptuamos el terrible agosto de 2008, cuando se perdieron 103.085 empleos. Hay, de todas formas, un dato positivo. El ritmo de destrucción decrece desde marzo y sigue haciéndolo. Del 56% de subida interanual en ese mes se ha pasado al 43% de agosto. El paro sube menos, pero todavía a un ritmo muy alto.

En Andalucía, son ya 803.137 parados, 17.451 más que en julio. En términos absolutos es la comunidad donde más sube, tras Cataluña, pero en porcentaje se sitúa levemente por debajo de la media (+2,22%). La comunidad concentra el 22% del paro nacional. Hace sólo dos años, en agosto de 2007, el número de parados registrados era de 485.693. Y hay que tener en cuenta un dato que hace la estadística aún peor. La mayoría de las personas que Trabajo no contabiliza como parados por estar realizando trámites burocráticos o ser eventuales agrarios subsidiados proceden de Andalucía. Son 204.708 de un total de 282.768. Si este dato contara la región superaría el millón de parados: 1.007.845.

El desglose de las cifras arroja elementos para el análisis. Continúa la tendencia a que la destrucción de empleo afecte más a hombres que a mujeres. 47.863 nuevos inscritos frente masculinos a 37.122 femeninos. El dato puede ser atribuible a que ya empieza a notarse la finalización de las primeras obras del plan de inversión local. Fue la construcción, de hecho, el sector donde más creció el paro en agosto en términos relativos (2,96%), seguido por industria (2,36%) y servicios (2,40%).

La agricultura sigue siendo la actividad con mejor comportamiento, con un descenso del paro del 0,09% en España y del 0,7% en Andalucía. Es llamativo  que el colectivo sin empleo anterior sea el que más haya crecido en Andalucía, un 2,66%, y más aún que la mayoría de estos inscritos, 44.000, tengan más de 44 años y de ellos 37.000 sean mujeres. La crisis obliga a clases  pasivas a convertirse en activas.

Un reflejo del parón de la actividad en España es el número de contratos realizados en agosto, 944.823. Desde agosto de 1999 no se contrataba tan poco, y aquí está una de las claves del incremento del paro. Han bajado un 10,01% respecto a julio y un 20,18% en lo que va de año. Aún más revelador es que sólo el 7,27% de los contratos fueran indefinidos. En Andalucía estamos aún peor: un 4,52%. Es un indicador bastante relacionado con el hecho de que el 44% de los andaluces tenga baja o muy baja ocupabilidad. Es decir, que por razones diversas tiene pocas posibilidades de encontrar empleo. Y menos cualificado.

¿Y el futuro? La secretaria general de Empleo, Maravillas Rojo Rojo, aportó el pronóstico del Gobierno. Dijo que en septiembre habrá un "repunte puntual" pero inferior al año anterior, en la línea con la opinión del Gobierno de que el otoño será malo pero mejor que 2008.