Los sindicatos presentes en Banca Cívica criticaron ayer la aplicación por parte de Banca Cívica de unas 560 suspensiones forzosas por parte de la entidad financiera entre el lunes y el miércoles de esta semana, según señalaron a Europa Press fuentes sindicales.

Las mismas fuentes resaltaron que en total, entre prejubilaciones (470), bajas indemnizadas (204) y suspensiones voluntarias (218) se han acogido unos 892 empleados a las medidas voluntarias para los trabajadores resultantes de la reestructuración y fusión de Banca Cívica con Caixabank. El plan preveía inicialmente la salida de 1.500 trabajadores.

Los representantes sindicales criticaron que los datos ofrecidos por la dirección en una reunión mantenida en la tarde de ayer fueran globales y no desagregados por territorios. De igual manera, mostraron su disconformidad en la elección de manera "unilateral" del criterio usado para las suspensiones forzosas. Además, advirtieron que la entidad financiera fruto de la unión de Cajasol, Caja Navarra, Caja de Burgos y Cajacanarias ha comenzado a aplicar movilizaciones forzosas.

Por último, la representación de los trabajadores espera contar en lo más breve posible con la información más detallada sobre esta situación y acceder a las actas en las que "se señale todo lo que se ha hablado y, por tanto, haya un soporte legal".