Luis Griffo, director general de Teleroute para el sur de Europa, vivió bastante intensamente este verano la crisis del pepino. No en vano, la firma que dirige es líder mundial en soluciones para el transporte. Posee una amplísima base de datos a nivel europeo, que gestiona cada día más de 250.000 operaciones de carga, y a la que se conectan 70.000 usuarios. "No tenemos evaluado el impacto de una forma matemática, pero la falta de cargas en esos días respecto a la normalidad fue superior al 10%; hubo un impacto negativo durante unos días, pero después de este golpe se pudo reactivar de una forma constante y se volvió a cierta normalidad".

Uno de los servicios que ofrece Teleroute cobró especial relevancia entonces: la posibilidad de que las empresas o transportistas encuentren otro tipo de mercancía o desvíen el producto a otras zonas. "Una empresa con, por ejemplo, veinte camiones frigoríficos y que tiene base en el sur de España no puede tener capacidad sólo para cubrir Alemania, el sur de Francia y el norte de Italia; ya las hay que tienen bases en el este de Europa".

Griffo cree que el sector en Andalucía tiene bastante potencial. "Las empresas son activas y saben moverse fuera para buscarse la vida; el problema es la crisis interna en España, que está incrementando los impagos y obligando a algunas a cerrar". Otro problema es el de los impuestos, aunque Griffo dice que no es para tanto. "No son tan altos en términos generales [hace unos días el Gobierno subió 2,8 céntimos el litro de carburante a partir de 2012], se puede competir y aquí hay mucha empresa bien posicionada". El director-gerente de Teleroute cree, por otro lado, que el impacto de la tasa verde que se ha planteado a nivel europeo por las emisiones de CO₂ tendrá mayor o menor impacto dependiendo de "cómo se aplique" y, en todo caso, será para todos igual.

Por eso, Griffo recomienda a las empresas transportistas que no se obsesionen por el impuesto y sí por la calidad del servicio o la formación. Y es que, ahora mismo, escasean los transportistas con experiencia y bien formados. "Hay oferta de empleo, las empresas tienen necesidad de conductores; es un trabajo relativamente duro y también relativamente bien pagado, hace falta carné y horas de experiencia, saber aparcar un camión no es tan fácil". Lo ideal, según Griffo, es que la propia empresa apostara por la formación, por tener una cantera en reserva. Admite que, con la crisis, esa aspiración resulta cuanto menos complicada.

Ante la crisis y las previsibles subidas de impuestos, Griffo también recomienda la apuesta por la innovación. En este sentido, Teleroute ofrece, además de la bolsa de cargas, "el e-Confirm, un sistema de negociación a través de internet que incluye firma electrónica y que no necesita ni fax de ni teléfono". Gracias a este mecanismo, afirma Griffo, se garantiza la trazabilidad del producto durante un año.