El germen de la fusión, concebida para acceder al top ten de las cajas españolas, tuvo lugar en julio de 2006, fecha en que Antonio Pulido asumió el mando de El Monte y anunció como prioridad irrenunciable la integración con Caja San Fernando. El 30 de septiembre del mismo año, los consejos de administración de ambas cajas dieron su beneplácito a la unión. Cajasol nacía formalmente en mayo de 2007. El día 22 la entidad quedaba inscrita en el registro mercantil y se daba el pistoletazo a la integración operativa.

Arrancó también entonces la batalla de la imagen. El logotipo azul y albero comenzaba a lucir en las principales oficinas de Sevilla, Cádiz, Huelva y Jerez. El lema publicitario acuñado para la ocasión fue Amanece una Gran Caja. El siguiente hito llegaría en febrero de 2008 con la celebración de la I Convención de Mandos de Cajasol: 1.200 directivos fueron convocados para recibir de primera mano información sobre la fusión. Un mes después se constituía la Fundación Cajasol. La asamblea general de la caja aprobaba además su Código de Conducta y Responsabilidad Social, base para "analizar el comportamiento de los órganos de gobierno, el equipo directivo, los empleados, el grupo empresarial y cualquier tercero que actúe en nombre de la entidad".

En abril de 2008 se reestructura el bastidor directivo. El comité directivo se reduce de 21 a 12 miembros con el objetivo de "ajustar la cúpula a la dimensión actual de la entidad". En julio, el primer consejo de administración celebrado fuera de Sevilla -se eligió al efecto la Diputación de Huelva- pacta remozar el grupo empresarial de la entidad, rebautizado como Corporación Empresarial Cajasol. El consejo también avala la fusión de las compañías matrices que aglutinaban a las firmas participadas del sector inmobiliario. El gigante resultante representa una inversión próxima a los 1.000 millones repartidos entre más de 220 empresas que a su vez generan unos 17.500 empleos.

Entre diciembre de 2008 y enero de 2009 se producen dos avances más. Pulido anuncia la hoja de ruta que culminó ayer con el fin de los trabajos de la Oficina de Integración y desvela una inyección de liquidez al mercado de 4.150 millones a lo largo del presente año. En febrero, Cajasol presenta sus resultados, que caen un 19% debido al incremento de las provisiones. La entidad subraya que soporta la crisis mejor que la media del sector. En marzo culmina el sistema único de cuentas y servicios para sus más de dos millones y medio de clientes.