El director general de Empleo, Xavier Thibault, aseguró ayer que, tras la entrada en vigor de la reforma laboral en febrero de 2012, la indemnización media en los despidos colectivos está en 26 días por año trabajado con un tope de 16 mensualidades y "bajando". Thibault subrayó que ya no se habla de la indemnización improcedente de 45 días por 42 mensualidades.

Las empresas con pérdidas pueden despedir por causas económicas, técnicas, organizativas o de producción con 20 días por año trabajado con un tope de 12 mensualidades. Por tanto, para Thibault la indemnización que se está pagando ahora en los despidos colectivos comunicados a la Dirección General de Empleo se acerca a la fijada en la norma.

Otro de los efectos inmediatos que apuntó de la reforma laboral es el aumento de la flexibilidad interna (cambio de las condiciones laborales, caso de rebajas de jornada o de salarios, entre otras) frente a la externa (la reducción de plantilla).

Por su parte, CCOO y UGT y las organizaciones CEOE-Cepyme podrían cerrar en una semana un acuerdo para evitar que el 8 de julio, cuando venza la prórroga de un año fijado por la reforma laboral para los convenios pendientes de renovación -la llamada ultraactividad-, decaigan aquéllos que no se hayan pactado. Esto abriría la puerta a que millones de trabajadores pierdan los avances logrados en materia de salarios, jornadas o libranzas, ya que en ausencia del convenio de empresa, se acogerían al de ámbito superior, y, de no haberlo, al Estatuto de los Trabajadores, en el que se recogen los derechos mínimos de los empleados.

Fuentes próximas a las negociaciones aseguran que ambas partes tendrán una reunión el próximo lunes, en la que la patronal dará previsiblemente una respuesta positiva a la última propuesta sindical.