La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, aseguró este viernes que el Gobierno aún no tiene elaborado un "documento definitivo ni oficial" de la reforma laboral y reiteró que el Ejecutivo "sigue creyendo en un acuerdo" en la mesa del diálogo social. Por su parte, el presidente del PP, Mariano Rajoy, reclamó una reforma laboral orientada necesariamente a la articulación de medidas encaminadas a terminar con la temporalidad en el empleo e inspiradas en los principios de flexibilidad.

Después de que el pasado jueves se filtrara a los medios de comunicación que el Gobierno estaría pensando en dar "luz verde" a una indemnización por despido por causas objetivas de 20 días por año trabajado en el caso de empresas en dificultades, De la Vega quiso "disipar cualquier tipo de duda" en una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. "Es posible que puedan existir borradores y documentos de trabajo, pero no una propuesta oficial", aseguró la vicepresidenta.

Asimismo, De la Vega reiteró que el Gobierno "sigue creyendo en un acuerdo" en la mesa de diálogo social. "Apostamos por el consenso, y a vamos a apurar hasta el último instante todas las posibilidades", aseguró la vicepresidenta, para quien todas las partes del diálogo social "comparten el diagnóstico" y la necesidad de alcanzar un "mercado de trabajo moderno" para retomar la senda de la creación de empleo.

El mismo día que los sindicatos amenazaron nuevamente con una huelga general, el Gobierno sostiene además que está en permanente contacto con CC.OO. y UGT, y asegura que ambas organizaciones también saben que no hay ningún documento definitivo ni oficial más que el que el Gobierno les trasladó el pasado mes de abril y sobre el que se está trabajando.

Reunión con los grupos parlamentarios el 9 de junio

Así, la vicepresidenta primera del Gobierno aseguró que habrá que esperar hasta el próximo 16 de junio para conocer los detalles de la reforma laboral, día en que el Ejecutivo prevé aprobarla "de la mano de los agentes sociales" o bien por decreto, en el caso de que no haya acuerdo.

Los que sí tendrán ocasión de ver el contenido de la reforma laboral antes de su aprobación serán los grupos parlamentarios, con los que el Gobierno prevé empezar reunirse para intentar alcanzar el mayor nivel de consenso posible en cuanto termine la última reunión con los agentes sociales, prevista para el 9 de junio.

  Las reuniones mantenidas hasta la fecha han girado en torno a cuestiones como la reducción de la temporalidad, el impulso del empleo de los jóvenes, el refuerzo de los Servicios Públicos de Empleo o la flexibilidad en el seno de las empresas y en la negociación colectiva.

El Consejo Europeo y el Mundial marcan el plazo de la reforma

   Preguntada por si el Gobierno ha elegido aprobar la reforma laboral el día 16 para llegar al Consejo Europeo del día siguiente con los deberes hechos, De la Vega se limitó a decir que simplemente ésta es una fecha que "le encaja" al Ejecutivo. Asimismo, indicó que los días posteriores al Consejo de Ministros del día 16 estarán ocupados por la celebración del Consejo Europeo que, al ser el último que tiene lugar bajo presidencia española de la UE, resulta, por tanto, "muy importante".

En cuanto a la coincidencia de la aprobación de la reforma laboral y el debut de España en el mundial de Sudáfrica, y la posibilidad de que el Gobierno quisiera así rebajar la atención sobre la reforma, De la Vega aseguró que dicha hipótesis "no es seria". 

"La reforma laboral se presentará dentro del plazo por las razones que he dicho. Estoy segura que todos los españoles igual que quieren que gane España quieren una normativa laboral para recuperar senda del crecimiento", concluyó.

Rajoy, dispuesto a consensuar la eliminación de la temporalidad

Por su parte, Mariano Rajoy reclamó una reforma laboral orientada al único objetivo de crear empleo y liquidar las "dramáticas" cifras del paro en España, lo que según él pasa necesariamente por incluir la negociación colectiva y articular medidas encaminadas a terminar con la temporalidad en el empleo e inspiradas en los principios de flexibilidad.

En declaraciones a los periodistas tras visitar un centro de la tercera edad en Almería, Rajoy aseguró que para el PP resulta "capital y urgente" abordar las diferencias entre las grandes empresas y las pymes en lo que se refiere a la negociación colectiva y acabar con la temporalidad en una reforma para la que trasladó su disposición a "hablar" si quiere el Gobierno.

Al hilo de esto, criticó la inactividad "inaceptable" del Ejecutivo socialista durante los dos últimos años en esta materia que calificó de "básica", dos años "perdidos" según remarcó y que le obligan a decidir "aunque guste más o menos" y a que "no puedan estar a anuncios que se contradicen con los del día anterior y que sabemos que se van a contradecir con lo del día siguiente".