A grandes problemas, grandes soluciones. El primer ministro francés, François Fillon, llamó ayer a "una respuesta coordinada" europea contra la ralentización económica. "En una Europa unificada en lo económico y en particular en una Zona Euro unificada en el plano monetario, debe haber una respuesta coordinada de los diferentes países europeos", afirmó.

Fillon compareció ante la prensa tras presidir una reunión de crisis con los miembros de su Gobierno encargados de temas económicos para evaluar la situación, tras la bajada del 0,3 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) galo en el segundo trimestre, la primera en seis años. Una reunión similar a la que mantuvo el Gobierno español la semana pasada para aprobar el tercer paquete de medidas ante la crisis.

Fillon recordó, a este respecto, que, por primera vez desde la creación del euro, hubo un retroceso trimestral del PIB de la Eurozona entre abril y junio (del 0,2%). Por ello, dijo, Francia tiene "la responsabilidad", como presidenta de turno de la UE, de "suscitar el debate en torno a la coordinación de las políticas económicas europeas". En este sentido, precisó que la ministra de Economía, Christine Lagarde, le propondrá en los próximos días a él y al presidente francés, Nicolas Sarkozy, un "método" para lanzar esa discusión en la reunión de los titulares de Finanzas de la UE del 11 al 13 de septiembre en Niza.

"Tenemos un espacio económico común, una moneda común. Es indispensable" que los ministros del ramo de la Zona Euro y de la UE vean cómo coordinar las acciones realizadas a nivel nacional y también estudien si en la política conducida "colectivamente" en la UE puede haber medidas, como inversiones o apoyo a las pequeñas y medianas empresas, para reforzar el crecimiento. Además, Fillon excluyó un plan de relanzamiento basado en el gasto público para hacer frente al deterioro económico en Francia.