El Banco de España valoró "muy positivamente" la salida a Bolsa de varias cajas de ahorro, considerando que las necesidades de recapitalización del sector finalmente serán inferiores a los 17.000 millones de euros previstos, según un comunicado difundido el jueves por la noche.

El gobierno socialista decidió en marzo imponer ratios de solvencia más elevados a las cajas de ahorro, eslabón débil del sistema financiero del país, tras haber aplicado una vasta reestructuración del sector, que redujo el número de cajas de 45 a 18.

Las cajas tienen hasta septiembre para recapitalizarse, buscando prioritariamente capitales privados, lo que hizo que tres cajas ya salir a Bolsa. Como último recurso, está prevista una ayuda pública, en forma de nacionalización parcial temporaria.

"El Banco de España valora muy positivamente las salidas a Bolsa de CaixaBank, Bankia y Banca Cívica", afirmó el comunicado. CaixaBank, nacida del traspaso a bolsa de las actividades bancarias de La Caixa, empezó a cotizar el primero de julio, Bankia lo hizo desde el miércoles pasado y Banca Cívica desde el jueves.

La salida a Bolsa de estos grupos de cajas de ahorro, que habían transferido su actividad financiera a un banco al igual que la mayoría de las cajas, "merece ser resaltada por haberse hecho en unas circunstancias complicadas de los mercados internacionales y en un tiempo récord", destacó el Banco de España.

El organismo había calculado en marzo en un máximo de 15.152 millones de euros las necesidades de recapitalización del sector, una cifra que luego fue elevada a 17.024 millones de euros debido al fracaso de una fusión de cajas de ahorros.

Además de la salida a Bolsa, las cajas necesitadas de capitales también apelaron a inversores privados y vendieron algunos activos, lo que "disminuirá la necesidad de nuevos capitales", consideró el banco central.

Estos factores hacen que la cifra final de necesidades totales de capital "no se corresponda con la estimada en marzo y haya que esperar hasta el 30 de septiembre de 2011 (fecha límite dada a las cajas para recapitalizarse) para saber la cantidad exacta de capital adicional necesario", apuntó el banco central.

Estos pasos tienen lugar en un momento en que España está presionada por los mercados, que temen un contagio de la crisis de la deuda. El sector bancario español es una fuente recurrente de inquietud por parte de los inversores extranjeros.