La empresa Ángel Camacho Alimentación ha puesto en marcha una innovadora planta depuradora de aguas industriales, procedentes del aderezo y envasado de la aceituna de mesa, que permite su reutilización tanto en riego como en otros procesos industriales.

Según informó ayer la empresa en un comunicado, con esta planta de depuración se culmina un proyecto de investigación medioambiental que ha supuesto una inversión de 3 millones de euros y 7 años de investigación por parte de los departamentos de medioambiente, ingeniería y desarrollo tecnológico e I+D+I.

La nueva planta ha sido presentada en el marco de la III Semana del Ecologismo Positivo, que se celebra en Alcalá de Guadaíra.

El sistema permite depurar más de 100.000 metros cúbicos de aguas industriales al año y cuenta con fases de tratamiento biológico y ósmosis inversa. Esta planta es el punto y final de una solución global en materia medioambiental, que ha permitido reducir el consumo el agua en más de 80%.

"La culminación del proyecto ha permitido alcanzar nuestros objetivos medio ambientales, que son incluso más exigentes y restrictivos que la propia legislación ambiental, de aguas o la propia ordenanza local de vertidos", explicó Pedro Cruces, director de Medio Ambiente del grupo. Y es que las medidas puestas en marcha se traducen en un menor consumo de agua por kilogramo de aceituna procesada y en una gestión eficaz de los efluentes industriales.

El Grupo Ángel Camacho, compañía con sede en Morón de la Frontera, es un referente del sector agroalimentario que factura 145 millones de euros. Cuenta con más de 850 empleados, exporta a unos 85 países y tiene filiales en EEUU, Polonia y el Reino Unido.