Segunda participación consecutiva de esta comparsa marbellí en el Concurso del Gran Teatro Falla. Con una amplia experiencia, destaca la potencia de este grupo a la hora de interpretar el repertorio, como se vio el pasado año con 'Los hombres del rey'.

Actuación en preliminares

• el tipo. Personajes de un freak show.
• las coplas. El mayor espectáculo del mundo viaja en un carromato. Rarezas como una mujer barbuda y unos siameses asombran y horrorizan. Un show en el que esta comparsa intenta mostrar la realidad de la vida. Un planteamiento que nace de una correcta presentación pero que acaba flojeando en un popurrí que se acaba convirtiendo en una mezcla de todo -como le sucede a la gran mayoría de las comparsas- a partir de la excusa de los personajes. El grupo, con buenas maneras, ofrecería mejores prestaciones si estuviera algo más comedido en su interpretación. No convencen demasiado los pasodobles. En el primero, en el que cuentan una experiencia personal al narrar que de niños juraron en el Teatro Andalucía que algún día ofrecerían sus coplas, no queda claro hacia quién va dirigida su queja sobre las críticas a los grupos que no tienen calidad. Innecesariamente lacrimógena la segunda letra a Julen, con un horrendo remate en el que su hermano le lleva al cielo -¡qué alegría de Carnaval!-. Tampoco brillan los cuplés, en los que Padilla se retira porque un aficionado le dijo que echara cojones y su niño jugando al Fornite no se parece a ellos porque va cargado con un pico.

El veredicto del Diario del Carnaval

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