Enrique Ortiz ofreció dos versiones muy distintas el pasado domingo, donde realizó una discreta primera parte y una sensacional segunda en la que el juego ofensivo del equipo llegó siempre por su lado. El futbolista extremeño lamenta "la oportunidad perdida" para haber recortado la diferencia con los primeros clasificados y avisa del peligro que podría suponer perder en Salamanca.

Enrique cambió en el descanso del choque ante el Tenerife de la misma manera que ha variado su papel en el equipo con la llegada de competencia para su posición. El polaco Kosowski y el valenciano Natalio son las principales amenazas.

El jugador dio su opinión sobre el mal sabor de boca que ha dejado el empate a pesar de su buena actuación en los segundos 45 minutos. "Personalmente estoy jodido porque hemos perdido una buena oportunidad para acercarnos al tercero", admite. Y es que entiende que "hubiera sido un buen momento para dar un golpecito encima de la mesa venciendo a un rival que también pelea por meterse arriba", puntualizó.

Enrique se atrevió a dar un pronóstico a corto plazo sobre las posibilidades del equipo. "Dentro de tres o cuatro semanas ya veremos dónde vamos a estar", indicó.

El extremo cadista no fue capaz de aportar una explicación lógica al cambio de imagen de un periodo a otro el pasado domingo. "Nosotros siempre queremos hacer las cosas bien, pero hay momentos en las que no salen y el contrario también juega. Ellos nos ganaron la primera mitad y después lo hicimos nosotros. Pero no hay secreto para eso", reconoció.

Enrique cree que sólo el Málaga parece inalcanzable, ya que, según apunta, "quedan dos puestos". "El Málaga, si juega mal empata; están tocados como el año que subimos nosotros. Numancia y Sporting parece que tienen miedo a la altura".

Para acabar, avisó del peligro del próximo encuentro: "Si perdemos en Salamanca, podremos mirar poco a los de arriba. Otro resultado negativo nos pondría en una situación comprometida porque si te despistas, te metes abajo".