El Arsenal fue incapaz de salir con los tres puntos del estadio The Hawthorns del West Bromwich (1-1) y puso en peligro su dominio en la Premier, que comparte con el Liverpool y al que se aproxima el Chelsea de José Mourinho, que ganó con autoridad en Norwich (1-3).

El conjunto de Arsene Wenger, dirigido en el terreno de juego por el alemán Mesut Özil y el español Mikel Arteta, fue contracorriente desde el minuto 42, cuando Claudio Yacob aprovechó una acción de Morgan Amalfitano para adelantar al West Bromwich.

El acoso londinense no encontró premio hasta pasada la hora de juego, con un centro del checo Toms Rosicky que culminó Jack Wilshere. El punto sostiene al Arsenal en la cima gracias a la diferencia de goles con el Liverpool, que el sábado ganó al Crystal Palace con enorme solvencia.

Al acecho, dos puntos por detrás, está ya el Chelsea, que ganó en Norwich (1-3) gracias a su acierto en el tramo final del partido. El brasileño Oscar, a los cuatro minutos, facilitó la tarea del Chelsea a pase del francés Demba Ba. Pero el cuadro de Mourinho, incapaz de cerrar el choque, se complicó la vida pasada la hora de juego, cuando Anthony Pilkington culminó un centro de Ricky van Wolfswinkel.

El Chelsea tuvo acierto al final. Marcó dos tantos en los últimos cinco minutos. Primero, el belga Eden Hazard aprovechó una acción de Oscar. Y uno después, el brasileño Willian, que también salió desde el banquillo, llevó la tranquilidad a los visitantes con su primer tanto con el Chelsea.

El Tottenham, por su parte, se estrelló ante la visita del West Ham (0-3), que comenzó la séptima jornada antepenúltimo en la tabla. El combinado local desperdició cada una de sus ocasiones en la primera parte y pasada la hora de juego quedó en evidencia ante su rival. En el 66 marcó Winston Reid. En el 72, el portugués Ricardo Vaz Te amplió la renta. Y, en el 79, Ravel Morrison sentenció el choque.

Finalmente, el Swansea dio un paso atrás en su escalada. Con cinco españoles en su once titular cayó en Southampton (2-0). Adam Lallana y Jay Rodriguez arruinaron las expectativas del cuadro de Michael Laudrup.