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El objetivo es prolongar la euforia

  • El Atlético visita al Oporto subido en una nube tras su convincente triunfo en el Santiago Bernabéu

El Atlético de Madrid llevará hoy su euforia a la casa del Oporto para la segunda jornada de la Liga de Campeones, un duelo que coincide con el mejor momento del equipo rojiblanco y el máximo reconocimiento a Diego Simeone.

Pocos técnicos hay en estos momentos más alabados que el argentino. Aunque Simeone se esfuerce en rebajar la euforia, su equipo e hinchas viven instalados en una nube emocional.

"Va a ser un duelo de una exigencia muy alta, nos va a obligar a rondar la perfección para poder conseguir la victoria", admitió ayer Paulo Fonseca, el entrenador del Oporto.

Ambos equipos comenzaron su participación en la Liga de Campeones con sendas victorias, aunque éstas llegaron de formas diferentes. Mientras el Atlético ganó con solvencia por 3-1 al Zenit, el Oporto sufrió para vencer 0-1 en su visita al Austria Viena, teóricamente el rival más endeble del Grupo G.

Como reconoció Fonseca, el Atlético llega a Oporto "con la moral alta" después de encadenar siete triunfos seguidos en el comienzo de la Liga, un récord en la historia del club, incluyendo su victoria 0-1 del sábado en el campo del Real Madrid.

Lo único que lamenta el Atlético es no poder contar para la visita con Diego Costa, el futbolista más destacado del clásico capitalino. El brasileño deberá cumplir su segundo y último encuentro de sanción en la Liga de Campeones.

Unido a la ausencia de Adrián, lesionado, Simeone sólo se quedó con Leo Baptistao como acompañante de Villa. Sin embargo, cabe la posibilidad de que el técnico argentino juegue con éste último como único punta ante el Oporto. El Atlético tampoco podrá contar con el lesionado Mario Suárez.

El conjunto portugués llega al partido después de ganar 1-0 al Vitoria de Guimaraes en liga con un polémico penalti. El equipo todavía intenta adaptarse a las ideas de Fonseca y el Atlético de Madrid es un durísimo rival que pondrá a prueba su fortaleza.

"Para mí, el Atlético es un equipo italiano pero que juega en la Liga española, que defiende con bloque bajo y sale rápido al contraataque. Por eso preveo que será complicado encontrar espacios", resumió el entrenador del Oporto.

El Atlético luchará contra una estadística muy mejorable, pues sumó una derrota y dos empates en sus visitas al campo del Oporto, donde nunca marcó un gol. Y los rojiblancos están en el mejor momento para romper esa racha.

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