"En cada concentración hay algún motivo por algo y cuando no hay grandes cosas nos fijamos en las pequeñas". La experiencia de Vicente del Bosque le facilitó minimizar la nueva tormenta, de De Gea a Piqué, y centrarse en lo trascendental. Ganar a Macedonia sería un paso casi definitivo para estar en Francia 2016 y en eso se quiso centrar el seleccionador.

En primer lugar, se centró en las necesidades propias y confirmó que hará cambios. "Vamos a refrescar el equipo, ha habido sólo dos días de descanso y lo necesitamos. Creo que no perdemos fuerza ni energía, pero no voy a decir el número". El seleccionador nacional dio sus argumentos para ese necesario refresco. "Hay que darle valor a la plantilla que tenemos, son muy buenos jugadores, como los que jugaron el otro día. Creo que es oportuno dar esa vitalidad que nos ayude a ser un equipo fresco", declaró.

En segundo lugar, pidió respeto al rival: "Lo sabemos todo de Macedonia. Ha sufrido un cambio sustancial respecto al primer partido, pero es un equipo bien organizado y con alguna individualidad. Han cambiado su sistema de juego desde Valencia, lo que achaco al cambio de seleccionador".

Pero no pudo esquivar los temas candentes que solapan la estricta actualidad deportiva. Del Bosque fue preguntado sobre el cambio de sede del amistoso ante Inglaterra: "No puedo decir nada de eso, sí tenía idea de jugar en Alicante desde hace tiempo y lo conozco porque me han consultado. Es una decisión de la directiva de la RFEF. No sabía nada de jugar en el Bernabéu", aseveró el seleccionador, quien, obviamente, tuvo que hablar de Piqué. "Espero que nos demos cuenta de que él viene a defender a España y que ha jugado 70 partidos con la absoluta y 30 con las categorías inferiores y siempre ha tenido un comportamiento bueno. No debemos tener miedo a nada, pero sí me preocupa que se produzca una corriente difícil de parar. Espero que la sensatez nos recuerde que somos un equipo de fútbol y no debemos mezclarnos con otros asuntos", zanjó el salmantino.