Tras una larga época marcada por los fichajes de jugadores foráneos, el Real Madrid parece decidido a emprender un proceso de españolización, que ya empezó con la contratación de Isco.

"No soy racista, pero hay que españolizar la plantilla". Esas palabras las pronunció Íker Casillas, capitán del Real Madrid, quien pidió redefinir una identidad perdida en el club. Lo dijo hace más de cuatro años, un tiempo en el que los dirigentes blancos hicieron poco caso al arquero español.

Pero ahora el club parece girar en esa dirección. Isco será presentado hoy como vértice del nuevo proyecto del italiano Carlo Ancelotti y, según publicó el diario Marca, el técnico también pidió el fichaje del medio centro vasco Asier Illarramendi, de la Real Sociedad.

La fecha del 9 de abril marcó un pico en la globalización del vestuario del Real Madrid. El equipo blanco jugó ante el Galatasaray con un equipo formado íntegramente por futbolistas nacidos fuera de España a excepción del arquero Diego López, un hecho inédito hasta entonces en la historia del club.

En los tres que fue entrenador del Real Madrid, el portugués José Mourinho prefirió siempre mirar hacia fuera para contratar. En total, el Madrid de Mourinho invirtió cerca de 180 millones de euros en los fichajes de quince jugadores.

Sólo cuatro de estos futbolistas (Diego López, Callejón, Pedro León y Canales) fueron españoles y unicamente el portero fue titular para Mourinho, en medio de la guerra fría contra Casillas.

Entre las nacionalidades de esa quincena de jugadores fichados hubo amplia representación de toda la geografía mundial: Portugal (2), Turquía (2), Alemania (2), Croacia, Ghana, Francia, Argentina y Togo.

Durante esos años, los dirigentes del Real Madrid recibieron críticas de prensa y aficionados por obviar el excelente rendimiento de los jugadores españoles, refrendado por el triunfal papel de su selección. Así, emigraron futbolistas como Silva, Mata o Cazorla, a quienes en algún momento se vinculó con el club blanco. Pero todos ellos se marcharon a otras ligas europeas.

Otro ejemplo fue el de Carvajal, formado en las divisiones inferiores del Real Madrid y que la pasada temporada tuvo que emigrar al Bayer Leverkusen. Mientras el Real Madrid acusó graves problemas en esa posición durante todo el año, Carvajal triunfó y fue nombrado mejor zaguero diestro de la Bundesliga. El club blanco decidió recuperarlo para la próxima temporada.

Ahora, el Real Madrid parece decidido a apostar por el producto nacional, quizá un guiño más al inconfesable deseo de diferenciar lo más posible la era de José Mourinho de la nueva etapa de Carlo Ancelotti.

Además, el club de Concha Espina dio ficha del primer equipo a los canteranos Nacho Fernández, Morata y Jesé, de tal forma que Ancelotti podría formar ahora un equipo titular sólo con futbolistas españoles. Impensable en el Real Madrid hace años, cuando Casillas pidió esa españolización que sólo ahora comienza a atisbarse.