Croacia e Inglaterra también tienen esta noche un enemigo en casa en las semifinales del Mundial: sus propias piernas. El duelo en el Estadio Luzhniki llega marcado por el estado físico de ambos equipos tras un calendario extenuante.

La Croacia de Modric llega a la semifinal tras prórrogas en octavos y cuartos. En total, 272 kilómetros en las piernas y cuatro horas y 19 minutos en los dos últimos partidos, disputados el 1 y el 7 de julio.

Inglaterra, por su parte, jugó el 3 y el 7 sus partidos de octavos y cuartos, tres horas y 49 minutos sobre el césped y un total de 262 kilómetros.

A todo eso hay que añadir los tres partidos de la primera fase y toda una temporada extenuante para la mayoría de los jugadores. Modric, por ejemplo, alcanzó la final de la Champions con el Real Madrid y aterrizó en el Mundial con 43 partidos en las piernas.

Y en Rusia lo ha jugado todo salvo 30 minutos. Acumula casi 51 kilómetros y 518 minutos en el Mundial. Kane, la estrella de una Inglaterra mucho más joven que Croacia, descansó mucho más que Modric: en el camino a las semifinales pasó 392 minutos sobre el césped, completando casi 39 kilómetros.

"Tenemos tiempo de sobra para descansar y prepararnos bien", comentó Modric el sábado en Sochi después de que Croacia venciera en los penales a Rusia. "Claro que nos queda todavía energía para enfrentarnos a Inglaterra", añadió por su parte su seleccionador, Zlatko Dalic. "Ahora no queremos parar y queremos hacer nuestro mejor fútbol. Tenemos dos partidos por delante y estamos muy motivados. Tengo fe".

Las principales estrellas de Croacia superan o rozan la treintena. Modric tiene 32 años; Mandzukic, 32; Rakitic ya celebró los 30 y Perisic los cumplirá en febrero próximo.

En Inglaterra, Kane tiene 24 y está acompañado en la delantera por Dele Alli, de 22, y Raheem Sterling, de 23.