Los tres puntos se quedaron en casa del Cruceño, que ayer tuvo que emplearse a fondo para doblegar a un Sporting San Fernando muy bien plantado en el campo y que para nada demostró la mala clasificación que ocupa.

Fue un encuentro muy igualado el contemplado por los 300 aficionados que se dieron cita en el Municipal de La Cañada de Villanueva de las Cruces. El desgaste por parte de ambos equipos fue máximo desde el primer al último minuto, lo que contribuyó a que en el encuentro primara un ritmo altísimo.

Una de las acciones decisivas del choque fue la expulsión del jugador sportinguista Barroso en el minuto 43.