Torre Gailín y Sindicales firmaron las tablas en el Municipal de Puerto Serrano en un partido con un claro protagonista, el guardameta visitante Antonio, que salvó a su equipo de una más que posible derrota firmando tres intervenciones de lujo en remates que ya eran cantados como gol por la parroquia local. Para colmo, el portero industrialista también se alió con los palos en las primeras aproximaciones de los locales a meta en los minutos 3 y 24 del choque. En conclusión, el Torre Gailín mereció mayor premio ante un Sindicales que apenas tuvo presencia en el área rival. La nota negativa llegó casi al final con algunos roces entre jugadores.