Lo de Año nuevo, vida nueva, le ha venido como anillo al dedo al ya ex-rojiblanco Tornero, que ante la falta de oportunidades optó el mismo día 31 por coger las maletas y buscar nuevos horizontes que le lleven a una mayor continuidad sobre el rectángulo de juego.

El jugador valenciano se ha marchado al Logroñés, sumándose a la marcha de Sergio Torres que decidió como nuevo destino al Zamora, de manera que Tornero puede considerarse como el segundo gran fracaso del Portuense en la presente temporada.

El fichaje del extremo derecho que se vendió como el sustituto de Lorenzo Zúñiga, al que invitaron a salir la pasada campaña al Granada, y ni por asomo se ha acercado a las estadísticas que lograba el extremo izquierdo malagueño.

Pero, lo más sorprendente es que el valenciano es el menos culpable, pues ni siquiera ha tenido muchas oportunidades para demostrar sus cualidades. De hecho, en el único encuentro que saltó de titular, frente al Talavera, lo sustituyeron a los 33 minutos, coincidiendo con la expulsión del cancerbero Wilfred.

En total, 164 minutos son los que ha disputado Tornero como jugador del Portuense en liga. Muy pocos para las expectativas con las que llegó, por lo que se marcha dolido del Portuense. "Me voy con pena, por no haber podido demostrar mi valía. De mí, nadie podrá decir si soy bueno ni malo, porque no me han dado la oportunidad de demostrarlo, ninguno de los dos entrenadores que he tenido", refiriéndose a Burgueña y Orúe. A pesar de las dificultades Tornero también se lleva algo positivo de su experiencia en el Portuense, porque "fuera del fútbol, todo ha sido positivo y me voy muy agradecido a El Puerto. Como se vive allí, no se vive en ningún otro sitio, y donde vaya siempre diré que la ciudad es magnífica, lo mismo que el trato que allí he recibido de directivos y prensa. El mismo agradecimiento que tengo sobre Javier Otero, ya que fue una apuesta personal suya el venir al Portuense", dijo Tornero, que ya piensa triunfar en el Logroñés afirmando que "tenía otras ofertas, pero me llamó personalmente el entrenador del Logroñes Rafa Sáez, y eso me ha dado mucha confianza, aunque mi nuevo equipo esté entre los cuatro últimos. Allí si tendré la confianza suficiente, para justificar mi valía", concluyó.

El mercado de invierno abre nuevas fronteras para el Portuense y el xerecista Dani Zúñiga puede ser el primero en desembarcar. Sin embargo, su llegada no está siendo sencilla ya que la entidad rojiblanca lleva más de un mes trabajando en la cesión del jugador por parte del Xerez.

El pasado lunes, el secretario técnico, Javier Otero, se desplazó a la sede xerecista pero no pudo cerrar nada, ya que sólo Miguel Ángel Rondán estaba en las oficinas y no se pudo firmar la documentación. Con el jugador está todo cerrado, pero falta que el Xerez Deportivo lo haga oficial y por escrito.

Así que parece complicado que Zúñiga se incorpore de inmediato a las órdenes de Carlos Orúe, de manera que pueda citarlo para jugar contra el Marbella.