En los últimos 20 años, el ciclismo en nuestro país ha viajado subido a una montaña rusa. Tras los éxitos de Indurain se produjo un vacío que ahora se empieza a llenar con nuevas figuras, entre las que emerge el último gran campeón español, Alberto Contador. Ha llegado la hora de seguir apostando por este deporte y fijarse en las nuevas promesas que destacan en las categorías inferiores, como es el trebujenero Juan José Lobato.

Lobato cogió la bici por primera vez justo el año en que se retiró Indurain, quién sabe si como un presagio. Desde la cuna ha recibido influencias tanto de su padre como de su abuelo, grandes aficionados, y ahora ha decidido dedicarse por completo a él. "He estado estudiando hasta ahora, pero lo dejé el año pasado porque lo que realmente me gusta es el ciclismo", afirma Juan José.

El corredor de Trebujena forma parte del equipo Andalucía-CajaSur, que recientemente le comunicó que el año que viene estará en la categoría de profesional. "Recibí la noticia mientras disputaba la Vuelta a Portugal. Así que imagínate. Me puse muy contento y estoy muy ilusionado, pues poquito a poco se van cumpliendo mis sueños", dice Lobato. En apenas un año con el equipo, Lobato se ha ganado la posibilidad de competir al más alto nivel, para lo que entrena todas las mañanas varias horas.

A pesar de que las cosas marchan bien de momento, el trebujenero tiene los pies en la tierra porque es consciente de la concepción que la mayoría tiene de este deporte y por eso ve incertidumbre en el futuro: "Cada vez es más complicado encontrar patrocinadores para los equipos, ya que los casos de dopaje lo perjudican constantemente, lo que provoca que la gente piense que las trampas sólo existen sobre la bici", subraya.

Aunque los grandes medios de comunicación no le dan mucha difusión al ciclismo a no ser que se trate de las grandes competiciones, Lobato no tira la toalla y espera "que haya posibilidades de prosperar y que yo sepa aprovecharlas, por mínimas que sean", ya que quiere dedicarse por completo a la competición.

Chiclana, Carabuey, Montemayor, Écija, Valladolid y el Alto Guadalquivir son sólo los éxitos que Juan José acumula en 2010 en su extenso palmarés tanto en competiciones nacionales como internacionales, pero viendo su trayectoria estará pronto entre los mejores. Pocos seguidores quedan de aquellos que no se perdían un Tour, un Giro o una Vuelta a principios de los noventa y que ahora vuelven a disfrutar con la resurrección del ciclismo español. Es posible que ahí se vea Lobato en menos de lo que tarda en hacer un sprint.