El Sevilla se redimió al ganar al Deportivo y romper una racha de cinco partidos de Liga sin ganar en la que se vio superado en la tercera plaza por el Atlético, del que ahora se coloca a un solo punto, mientras que los coruñeses sumaron su cuarta jornada sin vencer y siguen cerca del abismo.

El choque comenzó con mucho ritmo e incluso con un fútbol loco, lo que se comprobó cuando sólo se llevaban 55 segundos y, en la primera jugada, los sevillistas abrieron el marcador por medio de Jovetic. Esto, sin embargo, no varió el planteamiento ni la intensidad de ninguno de los dos equipos, pues en un abrir y cerrar de ojos empató Kakuta. Este arranque alocado del partido, lejos de serenar el juego de ambos, lo revolucionó más. Así, siguió el intercambio de golpes hasta que Correa se internó por la izquierda, cedió a Escudero y, tras desviar su centro Germán Lux, Sarabia recogió el rechace e hizo el 2-1.

El duelo continuó abierto y con alternativas constantes. Así, a los 25 minutos, Kakuta marcó su segundo gol, aunque sobre la media hora Correa desniveló de nuevo la balanza al lograr el 3-2 de cabeza. Tras este festival más de goles que de buen juego, en la segunda mitad el choque se serenó, aunque el Dépor reclamó dos penaltis: al final del primer tiempo, por una posible mano de Franco Vázquez en el área; y ya en el segundo, en el 64, por una entrada de Mercado a Ola John, que había entrado por Marlos.

Los locales pudieron cerrar antes el duelo al crear numerosas ocasiones, como una de Jovetic, otra de Escudero y un doble remate de Iborra, la más clara, hasta que Ben Yedder hizo el 4-2 al final y amarró un valioso triunfo.