Alfredo Ortuño se reencontró el pasado domingo con el gol anotando el que dio la victoria al Cádiz sobre el Huesca. El delantero llevaba muchas semanas sin marcar después de un arranque liguero frenético -cinco tantos en las cuatro jornadas iniciales de LaLiga 1|2|3-, pero el gol del pasado sábado ha desembocado en la mejor versión de sus estadísticas en las primeras 13 semanas de competición, ya que nunca antes desde que es profesional (2010) había alcanzado la cifra de seis goles que ostenta ahora mismo. La aportación del ariete es una de las grandes bazas del equipo de Álvaro Cervera, pues si fuera capaz de mantener esta tónica, al final de Liga su número de goles debería ser más que significativo.

En la temporada 2010-11, Ortuño formaba parte de la plantilla del Albacete, entonces en la división de plata, pero en las 13 primeras jornadas no tuvo ocasión de estrenar su faceta goleadora. Una campaña después, aún con 20 años, pasó al Getafe para estar a caballo entre el filial (Segunda B) y el primer equipo. Obtuvo un gol después de los primeros 13 partidos con el segundo equipo azulón.

Otro filial, el del Levante, fue su destino una temporada después (2012-13) y repitió registro al firmar un único tanto con los azulgranas en ese periodo. En la 2013-14 se mantuvo en la categoría pero pasó del grupo I al IV para jugar en La Hoya Lorca. Con los murcianos logró cinco dianas en las primeras 13 jornadas, su mejor primer tercio de campaña hasta el presente ejercicio, y cinco más hasta el mercado de invierno. En diciembre abandonó Lorca para irse al Girona, donde hizo nueve goles. Esos 19 tantos representan por ahora los mejores números anotadores de Ortuño en una misma temporada.

Antes de recalar en el Cádiz el pasado verano, sus 13 primeras semanas de competición en Granada (2014-15) y Zaragoza (2015-16) se saldaron con cero y cuatro tantos, respectivamente.

Su etapa de amarillo le ha permitido conseguir su mejor primer tercio de Liga gracias a los seis tantos que lleva hasta el momento. Hizo el gol del empate en Almería (1-1) en la primera jornada; repitió una semana después en la igualada (1-1) ante el Mallorca; firmó uno de los dos del equipo en Miranda de Ebro (3-2); doblete ante el Getafe (3-0) una jornada después; y el del pasado domingo al Huesca (1-0). Su puntería ha dejado un total de ocho puntos en el casillero cadista, que no es poca cosa para un recién ascendido que aspira a obtener la permanencia.

Ortuño, nacido en Yecla (Murcia) hace 25 años, fue una de las grandes apuestas de Quique Pina y Juan Carlos Cordero cuando se hicieron cargo de la gestión deportiva de la entidad. El hombre-gol para el primer equipo estaba marcado por ambos en rojo, coincidiendo en que la elección adecuada y preferida era la de este jugador.

A Ortuño le llovieron las ofertas el verano pasado, alguna de Primera como fue el caso del Osasuna. De Segunda A..., media Segunda A suspiraba por tenerle en sus filas. Sin embargo, el jugador hizo lo que pocos en este deporte, tener memoria..., tener memoria y recordar que cuando no era nadie, Quique Pina le incluyó en su nómina y le 'movió' por equipos importantes en los que se podía hacer un nombre y ganar experiencia para crecer como futbolista y persona. "Hay clubes que apostaron por él muy fuerte a nivel económico y a nivel personal, pero ha decidido venir por la relación que tuvimos en su momento cuando estaba en La Hoya Lorca y se apostó por él. Ha sabido reconocer a las personas que en su momento también estuvieron cerca", explicaba Cordero en su presentación oficial como futbolista del Cádiz.

Esa apuesta del presidente y del director deportivo está encontrando la recompensa en forma de goles, los que Ortuño está logrando para que el Cádiz tome el camino adecuado en la temporada del retorno a Segunda División A. Pina y Cordero, expertos en descubrir lo que nadie, estuvieron firmes cuando vieron que en La Hoya Lorca existía una dinamita en ataque impropia para un club modesto de Segunda B. Una dinamita de nombre Alfredo y apellido Ortuño. Albacete, Getafe, Levante, Girona, La Hoya Lorca, Las Palmas, Granada, Zaragoza y Mallorca han contado con este delantero antes de pelear él mismo el pasado verano que su próximo destino debía ser Cádiz, Carranza, donde el disfrute es recíproco entre el futbolista y la afición.