El Virgili Fuentemar saldó con una dolorosa derrota por 3-5 la visita al Fernando Portillo del Albacete, conjunto que aprovechó sus ocasiones de gol mejor que un equipo gaditano que no mostró su mejor cara en la primera parte, en la que además se vio perjudicado por la labor arbitral. La reacción local en el segundo periodo no fue suficiente para al menos puntuar ante una de las plantillas punteras de la categoría.

El Virgili se adueñó del balón en ataque en el primer acto, mientras que los visitantes se plantaron en media cancha con una defensa agresiva y esperando el robo para salir a la contra. A los nueve minutos llegó el 0-1 tras un robo de Edu, que marcó a portería vacía. Los gaditanos no conseguían romper la defensa albaceteña con un juego demasiado estático, y en un nuevo robo provocó la jugada polémica del partido. Un disparo a portería sacado bajo palos por Adri con la mano pegada al pecho fue considerado penalti con la consiguiente expulsión del jugador local. Víctor colocaba así el 0-2 con el que ambos equipos e fueron a vestuarios.

El quiero y no puedo del Virgili en el primer acto dio paso a una segunda mitad más vistosa de los amarillos, que se llegaron al igualar la contienda con tantos de Alber y Francis. Cuando el pabellón estaba volcado, un despiste grave en defensa provocó que Álex lograra 2-3 cuando quedaban diez minutos para el final. Jose tuvo el empate en sus botas, pero Ordóñez lo evitó con una gran intervención. El partido se puso emocionante y el último minuto deparó tres goles, el primero para los visitantes (2-4). Nada más sacar y con portero-jugador, Rugama colocó un esperanzador 3-4, pero luego llegó la puntilla manchega.