La recuperación experimentada por el Puerto Real en el presente 2009 es un hecho incontestable a tenor de los resultados obtenidos por el conjunto puertorreraleño, algo que se dejó traslucir el pasado sábado con triunfo ante el Recreativo B que lo ha situado a tan sólo un punto del cuarto clasificado del grupo.

De este modo, el equipo entrenado por Boro vive el momento de la competición en el que más cerca ha estado de poder acceder a los puestos de privilegio, objetivo con el que partió a comienzos de esta campaña el cuadro de la Villa.

No en vano hay que indicar que el verdiblanco es el mejor conjunto del actual año si tenemos en cuenta el desarrollo de las nueve jornadas que se han disputado en el mismo. Al respecto, cabe apuntar que la entidad del Sancho Dávila suma en dicho periodo un total de 20 puntos gracias a seis triunfos, dos empates y una sola derrota, la sufrida en casa ante el Jerez Industrial. En esa hipotética clasificación lo seguirían de cerca los dos líderes destacados de la tabla, San Roque de Lepe y Jerez Industrial, ambos con 19 puntos si bien los onubenses tienen un partido menos.

Los datos que son claramente significativos y de ellos se desprende que si el Puerto Real hubiera mantenido esta misma trayectoria desde el inicio liguero ahora mismo estaría destacado en lo más alto de la clasificación.

Igualmente, como apunte revelador hay que reseñar que en las primeras nueve jornadas los de la Villa sumaron sólo nueve puntos en un irregular arranque, menos de la mitad de la cifra alcanzada en el mismo número de choques en el presente 2009. Además, lograron romper en la primera cita del año la sequía que atravesaban como visitantes, enterrada en tierras corianas gracias a un solitario gol de Vicente.

Otro de los aspectos que ha mejorado el equipo verdiblanco es el capítulo defensivo, siendo en estos momentos uno de los que menos goles ha encajado con 23, a sólo uno de Alcalá y San Roque, que son los que lideran este apartado. De hecho, la portería de Raúl lleva cuatro encuentros de manera consecutiva sin verse perforada, lo que da muestras de la consistencia y seguridad defensiva mostrada por los jugadores adiestrados por Boro.