El presidente del Puerto Real, Antonio Bohórquez, confía en que el club pueda mantenerse en Tercera División y que los problemas económicos no lleven de nuevo a la entidad a Primera Andaluza. Además, espera jugar en el campo del Río San Pedro la próxima temporada.

El máximo responsable de la entidad pretende llevar los partido a la barriada puertorrealeña. "Es una pena que un equipo recién ascendido a Tercera como este tenga que practicar la transhumancia", comentó ayer Bohórquez antes de subrayar que "si hace falta jugamos hasta en la playa". El Puerto Real no dispone de campo propio tras el derribo del Sancho Dávila y la pasada campaña disputó sus encuentros en El Rosal.

Por otro lado, el dirigente deportivo se encuentra disconforme con las palabras del teniente de alcaldesa del Ayuntamiento de Puerto Real, Juan Carlos Martínez, quien dijo que "el Ayuntamiento no ha incumplido ninguna de las negociaciones firmadas con el Puerto Real, pero ellos no pueden decir lo mismo", entre otras cosas. Según el presidente, el Puerto Real tiene las cuentas saneadas y no debe nada a nadie. "A día de hoy, el Puerto Real es más rico que el Cádiz CF", afirmó con rotundidad.

El mandatario del club considera que lleva la razón y por ello está dispuesto a retar a un debate público a Juan Carlos Martínez "para confirmar con datos que el Puerto Real no tiene deuda alguna en la actualidad". Bohórquez incluso piensa en querellarse contra el edil por sus palabras acerca del club.

El presidente se reunió el pasado martes con socios, aficionados y empresarios, un encuentro que le dejó muy buen sabor de boca. "No hubo que explicar nada, bastó con poner los datos objetivos sobre la mesa para que los asistentes comprendiesen la situación del Puerto Real". Bohórquez también expresó en esa misma reunión su disconformidad con las declaraciones vertidas por el concejal. "La mayoría absoluta, produce una ceguera total", añadió.

A pesar de todos los problemas, desde la presidencia del club se cree firmemente en la posibilidad de mantenerse en Tercera División y no tener que sufrir el terrible castigo del descenso como consecuencia de las dificultades económicas.