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Perasovic se inventa otro rodillo

El Valencia Básket será el rival del Barcelona en la final de la Copa del Rey de Vitoria 2013 tras superar al Gran Canaria con mayor facilidad de la que refleja el resultado final (83-72), en una semifinal tan amable como le resultaron los cuartos frente al Estudiantes.

El cuadro insular estuvo sin la chispa que demostró 24 horas antes frente al Bilbao y pronto se escapó su rival, lanzado por Doellman y aprovechando que Xavi Rey, decisivo ante los vascos, se fue pronto al banco con dos personales en dos minutos. Poco a poco, los de Perasovic fueron ampliando la diferencia sin apenas obstáculos (12-5, 17-8) hasta llegar al final del primer cuarto 17-10. Todo siguió igual en el segundo parcial y al descanso dominaban los levantinos por 39-22.

El partido pareció cambiar tras el descanso. El Gran Canaria empezaba a sacudirse el bloqueo mental de la primera mitad y, aunque Valencia recuperó de nuevo los 18 puntos de ventaja (47-29), se le veía con otras intenciones. Lo confirmaron acercándose a ocho puntos (51-43) a poco más de un minuto para el final del tercer cuarto.

Pero todavía quedaban algunos segundos para cerrar el parcial. La réplica fue mortífera. Doellman encadenó siete puntos consecutivos para darle luz al ataque taronja y, con solo 4 cuatro segundos para el final del periodo, Pau Ribas corrió como un poseso la pista, voló en el aire mientras armaba el brazo desde más de siete metros y acabó con un triple con todas las esperanzas de remontada de su oponente. Parecía no haber partido ya. Y no lo hubo ya. Los últimos minutos sirvieron para que el Gran Canaria empezase a arañar puntos hasta un honroso 83-72 que ponía fin a su cuento de hadas.

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