Dos triples desesperados, uno fallado y otro anotado, marcan el principio y el fin del ciclo más exitoso del baloncesto español, que en los próximos campeonatos y con obligados cambios en el equipo deberá determinar si el Mundial de Turquía es un punto y aparte o sólo un punto y seguido.

Un triple. El del argentino Andrés Nocioni en las semifinales del Mundial de Japón 2006. Un tiro bien elegido, desde la esquina, para un buen lanzador. Factible. No entró y España ganó y accedió a la final que luego ganó. Oro mundial que inició un ciclo en el que se conquistaron además una plata europea y olímpica y un oro europeo.

Un triple. El del serbio Milos Teodosic el miércoles en los cuartos de final del Mundial de Turquía. A falta de menos de cuatro segundos, con el partido empatado. Desde nueve metros, ante un defensor más alto y tras un solo acierto de siete intentos durante el partido. Casi imposible. Casi. Teodosic lo anotó y España cambió la lucha por las medallas por la del quinto puesto.

Cuatro años de éxitos entre Nocioni y Teodosic. España descansa este jueves antes del casi intrascendente choque del viernes ante Eslovenia. Tiempo para hacer balance. "Este proyecto ha estado y está muy bien, para nada va a recaer. Este equipo tiene mucho talento y en el próximo campeonato iremos a competir y a ganar", dijo Rudy Fernández, de 25 años, uno de los jugadores que deben liderar la resaca.

"Mirar al futuro no es fácil, me alegra que haya dicho eso un jugador tan importante, ése es el camino", dijo Sergio Scariolo, el técnico español, cuya continuidad no parece en peligro. Scariolo -o su sucesor- deberá empezar no una revolución, pero sí cierta renovación, aunque la gran mayoría del bloque se mantendrá al menos hasta los Juegos Olímpicos de Londres 2012.

Jorge Garbajosa, con 32 años, y Alex Mumbrú, Felipe Reyes, Juan Carlos Navarro y Pau Gasol -ausente en Turquía-, con 30, son los más veteranos de un equipo que tiene en Ricky Rubio, Rudy Fernández y Marc Gasol a sus referentes futuros, sin olvidar que José Manuel Calderón, baja en el Mundial por lesión, aún tiene mucho recorrido con 28 años. Pero jugadores como Sergio Llull (22) y Víctor Claver (21) están obligados a dar un paso adelante. Por detrás llegan Carlos Suárez (24) y Josep Franch (19). Más carencias parece haber en los pivots.

El relevo deberá encarar a una Serbia, el verdugo del miércoles en Estambul, que aparece como futuro equipo dominante por su ilimitado talento, ambición y juventud: en Turquía presenta una media de 23,5 años y el año pasado ya fue subcampeón europeo.

Pau Gasol, una de las grandes estrellas del baloncesto mundial, volverá a marcar a la selección con su presencia o ausencia. "Somos un equipo diferente", dijo Scariolo antes del partido ante Serbia recordando la final de hace un año contra los plavi en el Europeo de Polonia. España ganó fácil. La diferencia en cuanto a jugadores "sólo" era Gasol. "Que no esté Pau es una ventaja porque en el Europeo resultó determinante", había dicho Nenad Krstic la víspera del partido.

Gasol aseguró en Estambul el miércoles que su ausencia en la selección es algo "puntual", por "necesidades físicas". Disfruta jugando con su país, pero es ya una megaestrella en la NBA, donde ha ganado como pívot titular los dos últimos anillos con Los Ángeles Lakers. "Lo decidiré año a año en función de cómo acabe la temporada de la NBA", dijo el pívot, un jugador determinante, MVP del Mundial de 2006 y del Europeo de 2009. La última cita que se perdió con España fue el Europeo de 2005, la última en la que el equipo no se colgó una medalla porque fue cuarta.

Ahora toca digerir una derrota en cuartos que no llegaba desde hace seis años. Y surgen discusiones y debates sobre por qué España en los últimos 25 segundos de partido decidió quedar a merced del talento serbio, que cerró el partido con un 50 por ciento de acierto en triples (15/30). La táctica conservadora de Scariolo de esperar un error no funcionó. Con la prórroga asegurada, Teodosic se jugó el triunfo. Lo que Nocioni no consiguió lo logró el mejor base de Europa en la actualidad. Y España cerró un ciclo. ¿Punto seguido o punto y aparte? La respuesta, en el Europeo de Lituania en 2011 y en los Juegos de Londres 2012.