El Puerto Real CF comenzará este domingo la competición en Segunda Andaluza. Un hecho que podría ser tan corriente para cualquier club de fútbol de la categoría tiene un valor especial para la entidad verdiblanca, al borde de la desaparición hace apenas un par de meses y que finalmente podrá continuar con su proyecto deportivo mientras se reordenan las piezas del puzzle institucional. El cambio en el concurso de acreedores de abreviado a ordinario y la intervención directa del administrador de dicho concurso, Juan Francisco Sánchez Rojas, asumiendo el control de la entidad tras la retirada de las facultades patrimoniales a la actual junta directiva por sus continuos incumplimientos han evitado la desaparición de un club, el verdiblanco, con 84 años de historia.

Acompañado del responsable de la parcela deportiva, Javier Otero, Sánchez Rojas desgranó en rueda de prensa la situación en la que se encuentra actualmente la entidad. Reconoció en primer lugar que "pensábamos que no iba a ser posible, pero con el esfuerzo de todos se está poniendo en competición y este domingo tenemos de nuevo al Puerto Real en el terreno de juego". El abogado explicó que la entidad "tiene dos facetas, la deportiva, que vamos a intentar sacar adelante al margen del tema patrimonial, y la parte jurídica". Sobre esta última, destacó que todo gira en torno al conflicto con la Epsuvi, principal deudora de la entidad. Señaló que a través de los juzgados "se hizo una demanda para anular el convenio de 2012, que entendemos que perjudica a la entidad. Esta demanda se perdió en el juzgado por no tener toda la documentación en nuestro poder (que no fue facilitada por el propio club) y se ha recurrido a la Audiencia Provincial. Esperamos que ya con toda la documentación completa se pueda restituir el convenio de 2010". Sin embargo, por parte de la entidad la intención es "no estar a expensas del juzgado, sino llegar a un acuerdo para resolver el convenio con Epsuvi que sea satisfactorio para todas las partes". Tras muchos meses sin siquiera poder acceder a una reunión, parece que ahora "la negociación se está flexibilizando un poco más". Por suerte, asegura, "el Ayuntamiento tiene el ánimo de resolver este asunto, no tiene ningún interés en que el club desaparezca, sino en que se arregle esta situación".

En cuanto a la faceta deportiva, el administrador del concurso de acreedores aclaró que "mientras se resuelva el tema con la Epsuvi el club tiene que sobrevivir solo. A efectos deportivos el Puerto Real empieza de cero, sin patrimonio. Tiene que nutrirse de la esponsorización, de las cuotas de socio (que no se estaban cobrando) y de las entradas, si conseguimos que el equipo tenga el atractivo suficiente para los aficionados. Intentaremos que el club sobreviva por sí mismo, sería un gran orgullo para todos los que lo han conseguido".

Poco a poco la entidad va dando pasos en la buena dirección y ya hay incluso una fecha fijada para acabar con el desgobierno de la junta directiva presidida por Victoriano Cordera, actualmente sin competencias por mandato judicial. Será el próximo 29 de octubre, a las diez de la mañana y con el salón de actos del Centro Cívico Ciudad Abierta como escenario, cuando se celebre la asamblea de socios solicitada en julio de 2014 y que finalmente ha tenido que ser convocada judicialmente. Uno de los temas pendientes de aclarar es precisamente el listado de socios, ya que "no me consta ningún libro de socios oficial, no sé si existe o si desapareció".

Sánchez Rojas pide abiertamente la colaboración de los aficionados para conseguir que el Puerto Real siga adelante, ya que de los ingresos que estos puedan aportar bien como socios, bien en concepto de entradas, dependerá la supervivencia económica de la entidad. "Este proyecto requiere que los aficionados muestren su interés y recuperen la confianza en el club". Hay que recordar que el Puerto Real "ha estado al borde de la desaparición", pero el equipo "está en competición" e intentará sobrevivir "gracias a la esponsorización, las entradas y las cuotas de socio, apoyándonos en la confianza de los aficionados", reiteró.

Por su parte, Javier Otero recordó a la afición que el hecho de que el equipo esté en concurso de acreedores "garantiza que las cosas se van a hacer bien. Todo aficionado que venga al fútbol o que quiera colaborar tiene que saber que está todo muy controlado". Centrado en su parcela, la puramente deportiva, coincidió con Sánchez Rojas en que "el club está en una situación en la que va por dos vías, la jurídica y la deportiva, y nosotros tenemos que mirar sólo a la segunda. Hemos empezado tarde pero estoy contento con la plantilla, agradezco al concejal de Deportes que nos haya facilitado entrenar y jugar en El Rosal". En principio "no nos tenemos que marcar ningún objetivo, lo importante es que el equipo va a competir. Quiero que los aficionados confíen en la entidad, que poco a poco va a salir hacia arriba. El apoyo de los aficionados es vital porque el equipo no tiene ningún recurso". Más allá de resultados, la mayor preocupación de Otero es que el Puerto Real "tiene que pasear su escudo por todos los campos con dignidad, algo que últimamente no estábamos consiguiendo. Entre todos tenemos que llevar al club donde se merece, que es como mínimo la Tercera División".