Después de pasar más tiempo en el banquillo que en el campo, al argentino Javier Mascherano le llegó la oportunidad de sentirse parte del éxito del Barcelona tras su actuación ante el Arsenal, por la que recibió el calificativo de "el salvador". Así lo sugirió Josep Guardiola, su técnico: "Si Mascherano no es más rápido en una carrera de 15 metros con Bendtner, estamos fuera (de la Liga de Campeones). Es un jugador hecho que conoce este oficio, que sabe de qué va este invento".

Mascherano, conocido como El Jefecito por sus dotes de mando, jugó el martes el partido más trascendental desde que llegó al Barcelona. Y fue una de las claves del pase de su equipo a los cuartos de final de la Liga de Campeones tras ganar por 3-1 al Arsenal inglés. El argentino jugó como titular porque las ausencias de los centrales Carlos Puyol, lesionado, y Gerard Piqué, sancionado, obligaron a Guardiola a retrasar a Sergio Busquets a la posición de defensa.

La plaza de Busquets fue para Mascherano. El argentino, anulado por el jugador español desde que llegó a Barcelona, completó una actuación sólida y en el último minuto estuvo providencial al evitar un remate de Bendtner cuando el Camp Nou temía por la eliminación de su equipo. Mascherano se marchó del campo justo tras esa jugada, roto de cansancio y con calambres en las piernas, como suele suceder con los futbolistas habitualmente suplentes y no acostumbrados a esfuerzos seguidos.

El argentino se entrenó al día siguiente en el gimnasio por sus problemas físicos y luego mostró su perfil más humilde en la sala de prensa. "No me siento un salvador. Me tocó participar en esta jugada sabiendo que es mi trabajo. En otros partidos le tocó a otros y no tiene nada de especial. Nos clasificamos por lo que hizo el equipo en conjunto y no por una jugada especial. Me quedo siempre con la actuación del grupo y no por la individual", manifestó.

Mascherano tampoco aprovechó su labor en el partido ni los elogios de la prensa para pedir más minutos de juego. Al contrario. "Sería un necio si me quejara para jugar más. No me puedo quejar teniendo a Xavi, Busquets o Iniesta. Me encantaría hacer lo que hacen ellos pero soy consciente de mis limitaciones. Con eso se nace", afirmó el capitán en la selección argentina y secundario pero importante con la camiseta azulgrana. Su compatriota Leo Messi comparte los elogios con Mascherano después de sus dos goles ante el Arsenal. "Es difícil explicar lo de Messi. No es normal lo que está haciendo, pero todos empezamos a verlo como normal. Este momento quedará en la historia y ojalá siga muchos años más por beneficio suyo y de todos", analizó.

Precisamente, desde comienzos de la temporada se comenta que Messi fue el principal artífice de que Mascherano acabara fichando por el Barcelona: convenció a Guardiola de su utilidad y de su carácter afable, ideal para no distorsionar el vestuario pese a no ser titular indiscutible. El tiempo parece que está dando la razón a todos y muchos aseguran que la inversión de 25 millones de euros ya quedó amortizada con su decisiva actuación ante el Arsenal.