El gaditano Pablo Guitián ha vuelto de Palma de Mallorca, donde ha participado en el 46 SAR Trofeo Princesa Sofía, con el objetivo cumplido. A pesar de no alcanzar un buen resultado, o al menos no el que esperaba, el deportista del Club Náutico Elcano consigue su clasificación a la Copa del Mundo que se celebrará en Hyeres (Francia), cerrada a los 40 mejores del planeta.

Aunque a él no le guste hablar de suerte -"la suerte no existe"-, dice, el gaditano no ha tenido de su lado los factores externos que pueden influir en la buena marcha de un campeonato de esta naturaleza. Guitián comenzaba en los puestos de cabeza, siempre entre los diez primeros, hasta un tercer día en el que todo se torcía. "Ese día fue fatídico para mí, con una bandera negra en una salida en la que arriesgué demasiado, y una descalificación injusta que tuve que pelear dos tardes seguidas hasta que logré que me quitaran, y que me desestabilizaron mental y físicamente". Hasta ese momento, se mostraba muy satisfecho con su rendimiento y velocidad tras una pretemporada que ha resultado bastante dura para él.

Ese día, Pablo sumaba dos últimos puestos que le condicionaron hasta acabar en la 26ª posición de la general y ser el primer español. "Lo de ser el primer español no es lo importante en estos momentos, no me hace especial ilusión, creo que he dado el salto de calidad que necesitaba y debería haber estado entre los quince primeros".

El gaditano pone su mira ahora en la Copa del Mundo, en la que "voy a darlo todo ya que a pesar de este contratiempo, soy consciente de que se ha tratado de un factor externo y de que he mejorado mucho en velocidad y táctica, así que voy a por todas".