Seis puntos de doce. Ese es el balance del Cádiz en los cuatro últimos partidos de Liga, enmarcados en el mes de diciembre. Un buen balance, pero un balance que no sacia la sed del aficionado más exigente, que sólo en el tramo final de la primera vuelta ha empezado a vislumbrar el techo del equipo de Javi Gracia.

Diez puntos de doce. Esos fueron los números del líder del grupo IV de Segunda División B en noviembre. Dos victorias en el Ramón de Carranza ante Écija y Antequera, un importante triunfo a domicilio a costa del filial del Betis B y un empate a tres goles en casa del Granada CF. Fue en este mes, en concreto en el partido ante el conjunto verdiblanco, cuando los amarillos empezaron a jugar sin la chispa con la que brillaban hasta entonces. El juego, pese a ser de once contra once y con un balón en los pies, dejó de ser el mismo. Y ese bajón sobre el césped ha culminado en la peor racha de resultados desde que Javi Gracia se pusiera al frente del submarino amarillo: tres empates y un triunfo en el mes de diciembre. Bendita racha. Tablas con Marbella y Jaén en casa, con la Balona a domicilio, y tres valiosos puntos en la visita al Poli Ejido. ¿Crisis de resultados? Sería injusto contestar de forma afirmativa, pero la exigencia se ha puesto a la misma altura en la que los cadistas pusieron el listón en el arranque liguero.

Tras las vacaciones, se retomará el campeonato jugando en casa ante un Guadalajara que llegará al Carranza en buena forma. Y es que la escuadra que dirige Rafael Carrillo suma un punto más que los amarillos en este último mes de diciembre. Seis ha enganchado el líder y siete su adversario del domingo 4 de enero.

Este último mes de 2008 ha empezado a aclarar el panorama de lo que se avecina. El Linares, pese a su crisis económica, es el equipo más en forma. O al menos el que más ha sumado: un total de nueve puntos. Poli Ejido, Jaén y Melilla han firmado el mismo registro del Cádiz y se confirma el buen momento del Marbella, que apunta alto. Granada 74 y Roquetas, ambos con siete puntos, empiezan a hacer ruido y cierran la tabla, con un solo punto, Antequera y Portuense.

Hay que ponerse las pilas.