Indignación, impotencia, incredulidad. Todos estos sentimientos y alguno más irreproducible se vienen a la mente del jugador del Guadalcacín Miguel Ángel Vázquez al conocer que ha sido sancionado con los mismos partidos que otros dos jugadores del Pastores habiéndose llevado la peor parte de la tángana que se produjo al término del partido Pastores-Guadalcacín, cuando uno de los jugadores del equipo algecireño (José Núñez) encendió la mecha al arrojar una espinillera a la zona de aficionados jerezanos.

El jugador del Guada recuerda el episodio: "Al terminar el partido vi que ese energúmeno cogió a la mujer de Emilio (el delegado del equipo) por el cuello y a mi novia. Yo no me lo pensé y me fui a intentar separarlos. Logré separar a mi novia pero me empezaron a caer palos desde todos sitios y no sé ni cómo salí de allí". Miguel Ángel presenta claras secuelas de lo sucedido con heridas en su rostro.

Puerto Real B y Vejer dejan escapar una buena ocasión para escalar posiciones con la disputa del duelo que tenían pendiente. Los locales dominaron más y sufrieron la anulación de un gol que parecía legal.