El Conil se reencontró con el triunfo tras golear al colista Guadalcacín como colofón a una semana complicada en lo institucional, por el problema de impago a la plantilla que finalmente ha resuelto el Ayuntamiento, pero que concluye de la mejor manera posible en lo deportivo. 

Pese a la abrumadora superioridad de los locales, curiosamente las primeras llegadas las protagonizaron los visitantes, Juanma Carrasco con un tiro raso que detuvo el juvenil Jaime en el minuto 4 y, dos después, Francisco José con otro remate que paró el meta en dos tiempos. La réplica de los amarillos, casi de inmediato, a cargo de Expósito, que pasa a Cuenca para que Lebrón aleje el peligro.

Superado el cuarto de hora, Mario García lo intentó sin fortuna. En el 23', una falta ejecutada por Cuenca la remató Narváez al palo y el rechace lo aprovechó Mario García, aunque el árbitro decidió anular la acción por fuera de juego muy protestado. En el minuto 29, córner que bota Cuenca y cabecea Narváez por encima del larguero.

La falta de precisión y el nerviosismo marcaban a los jandeños, entre los que destacaba Pablo, situado como lateral derecho por la sanción de Mario y que se compenetró a la perfección con Cuenca. De hecho, fruto de esta sociedad, en el 39', llegó el 1-0, al pasar Pablo a Mario García, que buscó a Cuenca para que el delantero marcara.

Hasta el descanso, poco más. Dominio del conjunto de Alfonso Cortijo aunque sin consecuencias frente a un adversario que hilvanaba sus ataque de forma tímida.

Nada más volver del vestuario, jugadón de Mario García, que envía a Cuenca para que éste, sin dejarla caer, empalmara para establecer el 2-0. Los jerezanos trataron de recortar con un tiro desviado de Juanma Carrasco, pero poco a poco se fueron difuminando.

Asentados defensivamente sobre el buen papel de los centrales Corti y Rubén, y proyectándose en ataque gracias al doble pivote que integraban por delante Mario García y Narváez, los conileños percutieron una y otra vez en este segundo tiempo hasta hacer desaparecer a su rival.

En el 55', un remate de Cuenca alto precedió como jugada peligrosa al tercero, en una acción de Cornejo que culmina Mario García.

Con 3-0, el Conil empezaba a gustarse sobre el césped frente a un Guada que ya bajaba los brazos. Así, en el 83', una individualidad de Javi Navarro se traducía en el 4-0, y cinco minutos después, en el 88', de nuevo un jugadón de Cuenca le permitía firmar su particular hat-trick con el 5-0.

En plena fiesta del Pérez Ureba, con la afición entregada a lo suyos, el colegiado apenas aguardó a que se cumpliera el tiempo reglamentario para pitar el final del encuentro sin conceder ni unos segundos de prolongación. El pescado estaba vendido y tampoco era necesario.