El entrenador del Racing, Alberto Ferri, continuará, de momento, sin ocupar el banquillo después de que el club no alcanzara ayer un acuerdo con el ex técnico rojiblanco, José Luis Burgueña, en el acto de conciliación celebrado en el CEMAC de Jerez.

El club sí ha conseguido avenencia con quienes sucedieron a Burgueña en el cargo, Carlos Orúe y su segundo, Manuel Perdigones, que aceptaron las fórmulas de pago de los 52.000 euros que suponen la suma de los débitos contraídos con los dos.

El actual responsable de la Balona indicó, según fuentes del club racinguista, que tiene que estudiar las fórmulas de abono presentadas por la entidad, por lo que se ha convocado un nuevo acto conciliatorio para el viernes 24, si bien podría arreglarse antes en función de la decisión de Burgueña, destituido en la sexta jornada de la pasada campaña y al que le restaba esa temporada y dos más, en virtud de un contrato firmado semanas antes.

El presidente del Portuense, Manuel Lores, que en las horas previas al encuentro se mostraba optimista sobre la solución del conflicto, recordando una conversación con el preparador vasco tras el partido disputado entre el Racing y la Balona, reconoció explícitamente su decepción al definirse como "jodido" a la salida del Centro de Mediación, Arbitraje y Conciliación, al que también acudieron los tres ex técnicos. Lores aseguró haber advertido en Burgueña "poco ánimo de colaboración" y expresó su preferencia "por no hacer más declaraciones en este momento".

El técnico del Racing, Alberto Ferri, que sigue sin poderse sentar en un banquillo que hasta la fecha no ha llegado a ocupar, se limitó a señalar, tras conocer el contratiempo, que "la directiva está haciendo todo lo que puede" y que prefería "no realizar más comentarios sobre el particular".

Alberto Ferri sí ha asegurado en ruedas de prensa anteriores que la situación "es perjudicial para el equipo", recordando que "por algo será" que el reglamento prevé la expulsión de los entrenadores de los banquillos y que "me juego el pan sin la tranquilidad necesaria para dirigir a mis hombres". Ferri ha llegado a plantearse que el problema conlleve arbitrajes más negativos para el Portuense, incidiendo en que "hay que arreglarlo como sea" y reseñando que "no tengo los mismos derechos que el entrenador del equipo contrario ni trabajo con las mismas armas" y que no considera adecuado que se valore su labor obviando esa circunstancia, "porque para juzgar primero hay que dejar trabajar".

El secretario del Racing, Carlos Camacho, negó que el club haya recibido sanciones económicas por parte de la Federación Española de Fútbol, así como que exista peligro de perder los puntos en la competición, si bien reconoció la apertura de un expediente por parte del ente federativo. Camacho sí concedió que, de mantenerse la coyuntura, "podría darse el caso de que se me inhabilitara a mí, en calidad de secretario, o al presidente del club, Manuel Lores Romero".