La selección española olímpica perdió ante la de Senegal en su primer partido de preparación para los próximos Juegos de Londres 2012, mostrándose muy inferior en el aspecto físico a su rival, que gozó de las mejores ocasiones y se llevó la victoria con justicia.

España se mostró muy apática, lenta, sin movilidad en su juego de ataque. Sólo Ander Herrera se ofreció para intentar activar las jugadas, pero los otros, muy estáticos, no parecían seguir el mismo ritmo. Senegal comenzó a llegar con peligro, sobre todo por la banda izquierda. Botía sólo recibió la tarjeta amarilla tras derribar como último zaguero a Yero, y desde esa misma banda, un saque de esquina de Gueye lo cabeceó de forma impecable a la red el central Seck. Ni el gol en contra despertó a un desconocido combinado nacional, muy falto de ritmo. Únicamente se acercó con peligro en el minuto 44 cuando Montoya, tras recibir de Oriol Romeu, entró en el área e intentó un sombrero al autor del gol, que tocó el balón con la mano. El árbitro señaló el punto de penalti, pero rectificó al consultar con uno de asistentes y concedió saque de esquina.

Milla introdujo dos cambios tras el descanso, con Rodrigo y Tello en las bandas derecha e izquierda, respectivamente, y también modificó las posiciones en defensa de Íñigo Martínez, que pasó a jugar de central, y Domínguez, al lateral izquierdo. Sin tiempo para asimilar la nueva idea, un rápido ataque senegalés, de nuevo por la izquierda, fue rematado en el centro del área por Sadio Mané, en semifallo, a la red. Con el 0-2, España no reaccionó en ningún momento ante un rival que se mostró muy superior.