El Barbate falló en su visita al Guadalcacín en un envite en el que los locales ofrecieron a sus seguidores el que sin duda ha sido el mejor encuentro en casa en lo que va de temporada, doblegando a un líder sólido que ni mucho menos desentonó.

Fue un partido de tú a tú, aunque gran parte del peligro lo ofreció el Guadalcacín, teniendo en Antoñito al protagonista del encuentro. El juvenil fue el bigoleador de la tarde, además de dar un gran recital de juego.

El Guada saltó a campo muy enchufado y esta circunstancia fue común a lo largo de todo el choque. Por su parte, el Barbate no salió a especular, pero poco pudo hacer con el ímpetu local.

La primera ocasión de peligro la tuvo en el minuto 8 el Guadalcacín. Madrugón botó una falta sin mayor peligro, pero el barbateño Dani no consiguió atrapar la pelota y Antoñito no llegó a rematar a portería por escasos milímetros.

Esto fue solo un aviso, ya que el juvenil consiguió abrir la lata en el minuto 22. Antoñito cogió el balón fuera del área y, sin pensarlo, lanzó un fuerte disparo inalcanzable para Dani, que sólo pudo hacer la estatua.

Poco después, el Barbate respondió y estuvo a punto de poner el empate en el marcador. Un balón aéreo se le escapó de las manos a Casqueiro, pero ningún atacante barbateño fue capaz de disparar a puerta en una ocasión clamorosa.

A poco del descanso volvió a tener la suya el Guadalcacín. Sánchez mandó un balón en profundidad sobre Javier Daniel, quien se plantó ante Dani y la media vaselina se marchó rozando el palo.

A la vuelta de los vestuarios, El Guada atrasó sus líneas y se vio a un Barbate mucho más abierto en la búsqueda del empate. Esta disposición sobre el campo no se tradujo en ocasiones visitantes y, sin embargo, fueron los locales los que ampliaron su ventaja en el marcador. Antoñito enganchó un balón espléndido desde dentro del área y la colocó por la escuadra.

Poco después, en el 68', otra vez fue Antoñito el que desde el centro del campo vio a Dani adelantado y lo intentó, marchándose fuera por muy poco.

El Barbate se volcó para intentar acortar distancias. Avisó Bollo con un disparo, y en el 81', una mano de Juan la señaló el linier como penalti. Daza no lo desperdició, aunque no dio tiempo para completar la remontada.