El jugador portugués Fábio Coentrao no formó parte de la expedición del Benfica que emprendió ayer su viaje hasta Nyon para hacer la pretemporada. Así lo apuntaron los medios lusos, que informaron de una ausencia que se interpreta como una señal de que la negociación por su traspaso puede cerrarse en los próximos días.

El lateral zurdo continuará los entrenamientos en Lisboa, después de que nada más terminar la temporada pasada hiciera público su deseo de marcharse al Real Madrid y trabajar con su compatriota José Mourinho. La comitiva del Benfica voló desde el aeropuerto de la capital portuguesa con destino a Suiza, donde permanecerá hasta el próximo 13 de julio, sin que ningún miembro del equipo hiciera declaraciones. El traspaso de Coentrao está valorado en cerca de 30 millones de euros -exactamente la cifra que figura en su cláusula de rescisión-, aunque se especula con la posibilidad de incluir en la operación a algún jugador para abaratar el coste.

Ayer mismo, la prensa portuguesa destacó el interés de los encarnados por contar en sus filas con el central argentino del Real Madrid Ezequiel Garay, con el objetivo de que sustituya el hueco dejado en la zaga por el brasileño David Luiz, el invierno pasado. Sin embargo, la llegada al Chelsea como nuevo entrenador del también portugués André Villas-Boas, ex técnico del Oporto, ha aumentado el interés de los londinenses por el lateral luso.

Según informó el periódico deportivo Record, el conjunto inglés anda en negociaciones con los lisboetas para hacerse con los servicios de Coentrao, e incluso mantiene conversaciones con su presidente, Luís Filipe Vieira. Los blues lanzaron el nombre de Rajkovic en la negociación sabedores de que el Benfica anda a la caza y captura de un central de garantías. Rajkovic, de 22 años, es internacional por Serbia y pertenece a la disciplina del conjunto londinense desde 2005, aunque ha sido cedido sucesivamente (OFK Belgrado, PSV Eindhoven, Twente y Vitesse) y no ha debutado nunca en Stamford Bridge.