El entrenador del Cádiz ofreció ayer su tradicional rueda de prensa de los viernes tras una semana menos tensa que la anterior después del triunfo ante el Melilla.  “No hay relax, pero está claro que supo muy bien la victoria, muy trabajada, muy dura, y al final tuvimos recompensa a un buen trabajo. Eso es lo más importante”.

Claudio advierte de la dificultad del próximo rival, el Cacereño. “Ahí están los números, ocho victorias consecutivas en casa, cero goles encajados… Muy fiable en su feudo y el terreno de juego, por imágenes que he visto con el Córdoba B, no parece que esté bien, similar a La Roda, La Hoya, pero eso no tiene que ser excusa. Hay que competir y hacer nuestro juego”.

“En todos los campos se gana la Liga. Ahora todos los equipos están más hechos, faltan menos jornadas y no te puedes permitir el lujo de fallar. Todos los rivales se juegan lo mismo que nosotros. Es evidente que afrontamos un partido muy duro. Si ganamos vamos a seguir ganando en confianza y creeremos en nuestras posibilidades”, asegura.

Tras explicar que en la sesión de ayer “no hemos hecho nada, con el viento hemos suprimido hasta el balón parado. Era imposible. Fútbol-tenis y gimnasio”, anunció que esperará a hoy para ver cómo evolucionan los tocados. “Jona se retiró pero parece que está bien, que sólo es una pequeña molestia. Mantecón parece recuperado, pero hay que esperar a que entre con el grupo. Será una sesión importante para tomar decisiones”.

“Alfredo y yo estamos pendientes de todas estas situaciones y es importante llevar a los que mejor están. A ver cómo se encuentran en la última sesión los que están más tocadillos y a partir de ahí intentaremos equivocarnos lo menos posible”, apunta el técnico, que reconoce que “en Lorca, Jona venía de una semana complicada, optamos por meterlo y acabó reventado. A lo mejor ese día nos equivocamos o me equivoqué poniéndolo de principio”.

Sobre la importante baja de Garrido, Claudio admite que “es un jugador diferente pero no nos condiciona. Hay que saber adaptarse y confiar en todos”. Y sobre el tipo de juego en un campo que se prevé irregular, aclara que “hay que intentar jugar como siempre pero ser inteligentes para saber dónde no podemos correr riesgos. Ellos lo saben perfectamente”.

El entrenador del Cádiz es consciente de la importancia de la estrategia en choques como el de mañana, pero también se muestra preocupado por la forma de jugar del Cacereño, “difícil de contrarrestar en casa, presionante, con  transiciones rápidas, muy verticales. Hay que estar muy atentos”.

Cuestionado sobre el juego del equipo con uno o dos delanteros, quizás menos brillante pero con más pegada, Claudio se remite a los números. “Están ahí. Se puede opinar lo que se quiera. Yo creo que el equipo juega bien de las dos formas. El futbolista no siempre está igual y eso no tiene que ver con el sistema”. Y en este sentido, sin Airam y con la posible ausencia de Jona, se atreve a afirmar que “no creo que vayamos sin delanteros” y recuerda que “en Elche jugaba con medias puntas y si el rival se sentía cómodo con marcas fijas, ponía cuatro medias puntas. Hay que ver qué es lo mejor para el equipo. Las bajas no son excusas, buscaremos soluciones”.

Por último, respondió a preguntas sobre la polémica de la anterior jornada entre Villar y Chota. “Sólo estoy preocupado en los rivales del domingo. Lo pasado, pasado está y no me preocupa. Le doy vueltas sólo a cómo contrarrestar al rival. Siempre creeré a mi futbolista. Le pregunté y le creo. De todas formas, lo que pasa en el campo se tiene que quedar ahí, aunque fue un partido en el que el rival hizo un gran trabajo defensivo, se vio por detrás en un penalti… Todo se enreda”. ¿Presiones del Cádiz para que lo sucedido no se reflejara en el acta? “No tengo ni idea de eso. Yo bajaba por el túnel y lo único que hice fue separar a mis futbolistas. No quería sanciones para no vernos debilitados. Estoy muy contento por el trabajo y la afición. De lo demás no quiero hablar. Me sorprende que no hablemos sólo del rival del domingo. En su momento le pregunté y Juan me dijo que no había dicho nada. Le creo y no hablo más del tema”.