Es habitual que en cada partido haya jugadores que se encuentren con equipos de los que formó parte en el pasado. Alberto Cifuentes, con una dilatada carrera a sus espaldas, llega hoy a Vallecas como portero del Cádiz, aunque en su día, hace una década, también fue inquilino de la portería del Rayo.

El cancebero formó parte de la plantilla de la escuadra vallecana durante dos temporadas, la 2005/06 y la 2006/07, cuando el conjunto madrileño militaba en Segunda División B. Las dos campañas fue titular y Vallecas fue su casa. Allí, en su segundo curso, fue parte activa del ascenso a la categoría de plata y evolucionó como portero antes de proseguir su recorrido profesional en el Salamanca, en Segunda A. Del Helmático pasó al Real Murcia, con el que vivió otro ascenso a Segunda A. Después firmó por La Hoya Lorca, se fue a Polonia -el Piast Gliwice- y llegó al Cádiz, con el que hoy pisa el césped de Vallecas pero esta vez como visitante y con el firme propósito de aportar su grano de arena para que su actual equipo puedan conquistar tres puntos de oro.

La nostalgia queda aparcada y el presente es lo que ocupa a Alberto Cifuentes, un trotamundos del fútbol que ha militado en más de una decena de equipos y que, a sus 37 años, disfruta cada momento de la recta final de su larga carrera.