La calma y la pausa al hablar y pensar es una de las grandes virtudes de un entrenador. Álvaro Cervera tiene ambas. No irán las cosas como él deseaba, pero es un técnico íntegro, con los conceptos muy claros y que sabe desenvolverse con enorme calidad humana cuando el viento no es favorable. Ayer respondió todo, lo esperado y lo más incómodo. No puso parches a la realidad del equipo, a los resultados y al juego, ni siquiera al asunto extradeportivo que supuestamente podría salpicar a Eddy Silvestre. Tampoco huye de la ley del fútbol cuando vienen mal dadas. Muy coherente de los pies a la cabeza.

El presente es complejo, y Cervera entiende y no esconde la realidad. "Venimos de dos derrotas dolorosas contra el Oviedo y en Vallecas. Cuando pasa esto, piensas muchas cosas y miras fallos. La semana está siendo lo más normal posible pero la gente está dolida; se nota. Hay ganas de volver a los orígenes". Es el máximo responsable de la plantilla pero reconoce que las dudas sobre lo que está sucediendo no paran de sucederse. "Me gustaría saber los motivos que nos han llevado a esto. Seguimos corriendo lo mismo pero ahora corremos mal. No sabemos la causa pero todo influye. Nosotros debemos tener una hoja de ruta y competir más de lo que lo hemos hecho hasta el momento", recalca.

El técnico cadista huye del término 'abroncar' cuando se refiere a sus pupilos. Su elección es el diálogo. "Hubo una charla de diez minutos el primer día (martes) de entrenamiento esta semana y a los futbolistas les dices cosas que ya saben. No soy partidario de que al futbolista se le eche la bronca y sí que recuerde cosas. Si esta situación se alarga y persisten los errores, habría que pensar en otros jugadores".

Llega el Girona aunque al preparador le inquieta lo que pasa en su equipo. "La situación nuestra me preocupa más. Contra el Oviedo hicimos los mejores primeros quince minutos, pero ellos gracias a un córner la metieron. Te tienes que preocupar de ser tú mismo y debemos dar otra sensación". Y es ahí donde sale a relucir el debate de siempre, la forma de jugar. "Nosotros jugamos casi siempre con dos delanteros y uno está pendiente del contrario en la zona media. No se trata de debate porque nunca sabremos quién tiene razón. Sabemos qué rendimiento debe dar cada jugador. Cuando ha habido permisibilidad, ellos mismos saben que cambiar es perjudicial. El debate es bueno pero no siempre te lleva a la solución", apostillaba.

Cervera entró en bastantes detalles al referirse al Girona, que calificó como "el equipo más diferente de la categoría". "Juega con tres defensas y cinco medios. Y lleva tiempo jugando así y ha estado a punto de subir a Primera. A balón parado son muy complicados y, además, disponen de buenos lanzadores. Ellos lo hacen bien y es complicado hacerles daño".

Inevitablemente se regresó al debate, ahora sobre la elección en la mediapunta y señalando a la opción de Santamaría. "Ortuño cogió la racha goleadora y por detrás pusimos a varios.... Santamaría lo hizo bien en Miranda, pero salió del equipo. En cualquier momento puede entrar. Después de lo de Miranda no fue un castigo porque no mereció la expulsión. Es un chico que nos viene bien".

La baja de Eddy y sus presuntos líos extradeportivos contó con la siguiente respuesta: "Futbolísticamente si no tienes a un jugador es un problema. Por lo otro, que esté alejado esta semana le puede venir bien".

Por último, el respaldo del club. "Siempre está al lado, pero esto es fútbol y hay unas pautas. Cuando se pierde hay nerviosismo pero el club lo intenta llevar normal. Hay apoyo, diálogo y mucha ayuda", finalizaba Cervera.