El Sevilla se clasificó por segunda vez en su historia para los cuartos de final de la principal competición continental (ya lo hizo en 1958 cuando se llamaba Copa de Europa) al vencer por 1-2 con doblete de Ben Yedder al Manchester United en Old Trafford, que lloró una nueva decepción del equipo de José Mourinho.

El empate sin goles de la ida dejó abierta la eliminatoria, aunque con favoritismo del United por historia y jugar ante su público. Pero el Sevilla dio la sorpresa y ganó su pase con todo merecimiento simplemente porque fue mejor. Old Trafford asistió a dos propuestas muy diferentes: mientras el United despreció el balón, el Sevilla sí lo quiso. El conjunto hispalense hizo muchos más méritos en los dos partidos y por eso pasó. Otra mala noche para Mourinho, que cuando quiso ir a por el partido era tarde.

El Sevilla pareció intimidado por el escenario en un principio, pero en cuanto se sacó los nervios asumió el mando del encuentro. Banega y N'Zonzi gobernaron el centro del campo, la zona que despreció Mourinho. Al United sólo le interesaron los balones a Lukaku.

Curiosamente, la ocasión más clara de la primera mitad fue para el equipo inglés. Fellaini se situó delante de Sergio Rico y el meta sacó el balón en una brillante intervención. A cambio, el Sevilla disfrutó de interesantes llegadas, pero casi todas murieron en el mismo sitio: fuera de la portería de De Gea, principalmente por el desafortunadísimo partido de Muriel.

La segunda parte fue similar, aunque en el comienzo Mourinho pareció mostrar algo más de ambición. Pero, más que eso, lo que de verdad mejoró al United fue que Alexis Sánchez comenzó a intervenir más poniendo excelentes pases a sus compañeros. En otra clara ocasión, Sergio Rico hizo una gran parada tras disparo de Lingard.

El paso de los minutos favoreció la aparición de los espacios. Y ahí volvió a ser mejor el Sevilla a pesar de que el técnico luso puso en el campo a Pogba como factor corrector. El francés no aportó prácticamente nada.

Mucho más trascedente sería el cambio que introduciría Vincenzo Montella en el Sevilla. A los 73 minutos entró en el campo Ben Yedder en lugar de Muriel y todo cambió inmediatamente. Porque un minuto después llegó el primer tanto del delantero. El Sevilla trenzó una excelente jugada que pasó por los pies de Sarabia, quien puso un buen balón que Ben Yedder mejoró. El pequeño delantero controló y superó a De Gea con un disparo junto al palo.

Y cuatro minutos después llegó el segundo tanto, obra del mismo autor. Fue en un saque de esquina pésimamente defendido por el United. Ben Yedder, el más pequeño de todos, encontró el balón muerto y batió a De Gea que estuvo poco acertado con un cabezazo lleno de habilidad. A falta de juego, el United sacó su orgullo con un gol en el minuto 82, anotado por Lukaku. Sin embargo, el conjunto español resistió.