El Chiclana cierra la temporada en casa en un partido de despedidas. Puede ser la del equipo del Municipal y será seguro la de Moisés Arteaga de la afición chiclanera. El técnico ha decidido emprender una nueva aventura en el extranjero y el de la Roteña será su último encuentro en el banquilloblanco, al menos por el momento.

El míster reconoce que están "un poco más relajados de la cuenta, nos estamos jugando el cuarto puesto pero ya estamos salvados y la relajación existe. Intento mantener la tensión pero es difícil a estas alturas". Sin embargo, no renuncia al objetivo de acabar cuartos y asegura que "intentarlo lo vamos a intentar". Reconoce que se han quedado muy lejos del objetivo marcado a principios de temporada, que no era otro que el ascenso, pero recuerda que "se fue gente importante y ese objetivo cambió". Aún así, "como profesionales intentamos dejar al equipo lo más arriba posible" e irán a aprovechar la jornada de descanso del Bazán para acercarse a los isleños en la clasificación.

Arteaga podrá contar con casi toda su plantilla en este último encuentro con el público del Municipal. El defensa Alberto Suazo, por motivos laborales, es la única baja en los chiclaneros de cara al encuentro ante los de Zafra.