El consejo de administración del Alavés que preside Fernando Ortiz de Zárate decidió ayer destituir del cargo de entrenador al gijonés Josu Uribe, debido a los malos resultados del equipo, y decidió nombrar al segundo, Julio Bañuelos, como preparador interino hasta que se contrate a otro técnico.

Nada más llegar a las instalaciones de Ibaia los expedicionarios alavesistas procedentes de Cadiz para reanudar los entrenamientos de la presente semana, el entrenador mirandés Julio Bañuelos fue el encargado de dirigir la sesión de trabajo, ya sin Josu Uribe en el campo, por decisión de la junta directiva albiazul.

El nuevo traspié (2-0) sufrido este último domingo en el Estadio Ramón de Carranza por el Alavés, ante el Cádiz, ya disparó todas las alarmas en el seno del club de Mendizorroza, por lo que se tomó la decisión de destituir al máximo responsable técnico, Josu Uribe.

Una vez que los administradores concursales del Deportivo Alavés dieron en la jornada de este lunes su visto bueno a dicha decisión del consejo de administración, el cese del hasta ahora técnico, Josu Uribe, se hizo ya oficial.

La marcha del equipo albiazul de Mendizorroza en lo que va de la segunda vuelta ha sido decepcionante, con tan sólo cuatro puntos sumados de los doce posibles, con una especial incidencia en los partidos disputados fuera de casa, en los que el equipo ha sido muy poco efectivo. Es el noveno técnico que es despedido en la presente campaña, en una lista con integrantes como Casuco, Stoichkov o Moré, entre otros.