IU ha anunciado que llevará al próximo pleno de la Diputación una moción “en defensa del sector de la flor cortada de la Costa Noroeste”, comarca gaditana en la que producción se concentra fundamentalmente en Chipiona.

Su portavoz en la institución provincial, Carmen Álvarez, ha manifestado que “la producción de la flor cortada ha sido, con diferencia, el sector agropecuario más afectado por los efectos de la pandemia, de manera que las pérdidas de los productores, viveristas y centros de jardinería han sido muy graves, por lo que es indispensable paliar esta situación y buscar soluciones de choque para el futuro inmediato”.

La propuesta izquierdista plantea que la Diputación “coopere técnica y administrativamente con el Ayuntamiento de Chipiona para poner en marcha el acuerdo adoptado por unanimidad del pleno de esta localidad el pasado 19 de noviembre de 2020 a fin de declarar la agricultura como Sector Estratégico para el Desarrollo Económico de Chipiona, y a colaborar en el diseño de un plan estratégico junto con el Consistorio y los agentes sociales que incluya las medidas conducentes a la mejora de la viabilidad técnica y económica de las explotaciones agrarias”.

Además, IU propone instar a la Junta de Andalucía y al Gobierno central a “articular las medidas necesarias para evitar pérdidas irremediables en una actividad fuertemente azotada por la crisis del coronavirus” y a que “se modelen las ayudas en función de dos variables, la empleabilidad o intensidad de la contratación por superficie y el volumen de contratación, sin vincularla unívocamente a la superficie cultivada”.

Álvarez recuerda que “la provincia de Cádiz es la primera productora de flor cortada de todo el país, con cultivos en Sanlúcar, Jerez, Arcos y Rota, junto a Chipiona, auténtico referente nacional en este mercado”, al tiempo que subraya que “la agricultura y la agroindustria generan el 53% del empleo en la localidad de Chipiona, por lo que hablamos de un sector decisivo, en el que se ubica la flor cortada, y desde las administraciones debemos prestarles todo el apoyo e impulso posible”.

IU destaca, igualmente, que “la superficie actual destinada al cultivo de la flor cortada es de 350 hectáreas, principalmente en invernaderos –llegó a superar las 700-, y supone en la Costa Noroeste una facturación -antes de la pandemia- en torno a los 90 millones de euros, lo que representa más del 1% de la Producción Final Agraria Andaluza”.

Según la portavoz izquierdista, “la paralización obligatoria en el sector de la flor cortada derivada de la pandemia se ha producido en los meses de mayor actividad, y lo peor es que todo sigue en el aire, sin horizonte claro a la vista, con costes fijos de mantenimiento, pero sin meter un euro en caja”.

Esta formación política lamenta también que “el sector todavía no ha recibido las ayudas de la Junta y de la Administración central para hacer frente a este considerable revés económico, unas ayudas que llegarán tarde, dado que han sido convocadas en una orden del 21 de octubre de 2020, y que son insuficientes para paliar la profunda crisis del sector”.