Con la Venia

Vuelva usted mañana. Por Fernando Santiago

Desde mucho antes de Larra España es un país de burócratas que conforman ese ogro inexplicable que refleja la serie "La Fortuna". Tantos vericuetos, estampillas, sellos, comprobantes, requisitos, documentos de todo tipo para que al final sigan robando los que lo hicieron toda la vida, antes Redondela , Matesa o Sofico, ahora Pujol, Kitchen, Gurtel, EREs , Aguas de Cádiz o Púnica. La burocracia complica las cosas al ciudadano pero no impide que quienes tienen poder se salten los controles . Cada escándalo de corrupción trae bajo el brazo una reforma legal donde se endurecen los requisitos para la gestión del dinero público, un Sísifo administrativo. La digitalización podría haber supuesto la simplificación en la tramitación de cualquier documento ante la administración cuando lo que ha significado es una complicación mayor. Se da por supuesto que toda persona tiene un móvil o un ordenador , el que no lo tenga pasa a ser un ciudadano de segunda, un infoparia que no podrá actuar ante la administración central, autonómica o local. Somos muy modernos, eliminamos la presentación de documentos físicos, los exigimos de manera digital sin pensar que puede haber personas que no puedan o no sepan hacerlo . Por si fuera poco la pandemia ha traído la costumbre del teletrabajo y la necesidad de obtener una cita vía digital para acceder a cualquier edificio público. En el Benito Villamarín se pueden juntar 60 mil personas , en el Nuevo Mirandilla 25 mil, pero no se puede acceder a los edificios del Gobierno, de la Junta o de un Ayuntamiento cualquiera si no te has conectado a Internet y has solicitado que te atiendan en esa forma que ahora se llama “presencial” que viene a ser en persona, como si fueras un ciudadano al corriente de tus obligaciones fiscales y en pleno uso de tus derechos constitucionales. El único que te atenderá con un poco de interés será el segurata de la puerta, una vez dentro del edificio verás oficinas vacías, con una de cada diez mesas ocupada por un probo funcionario, mezcla de la pandemia con el manoseado teletrabajo. El otro día en la Agencia Tributaria de Cádiz había tres personas para 30 puestos. Si usted quiere, por ejemplo, dar de alta un apartamento turístico antes de que el Ayuntamiento de Cádiz se lo prohíba, no le dejan hacerlo en persona, tiene que ser en la plataforma de la Junta de Andalucía. Si en su casa solo hay un Mac, tampoco podrá, porque está diseñada para PC. Si ha salvado ese escollo, puede tardar cinco días en ultimar los trámites con la presentación de todos los documentos requeridos, para que dos inspectores en toda la provincia de Cádiz supervisen 30 mil apartamentos. Un día de estos alguien inventará el manguito digital. Fernando Santiago

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios