Venganza: Conexión Estambul. Thriller-Acción, Francia, 2012, 85 min. Dirección: Olivier Megaton. Guion: Luc Besson, Robert Mark Kamen. Fotografía: Romain Lacourbas. Música: Nathaniel Méchaly. Intérpretes: Liam Neeson, Maggie Grace, Luke Grimes, Famke Janssen, Rade Serbedzija.

No sabemos exactamente cuándo decidió Liam Neeson que ya estaba bien de papeles interesantes y películas serias, tal es la deriva descaradamente comercial e intrascendente de su carrera como actor en la última década.

Las dos entregas de Venganza, producto de acción de usar y tirar avalado por Luc Besson y dirigido por su compinche Olivier Megaton (Transporter 3, Colombiana), son un ejemplo claro de este desinterés por todo lo que no sea prestar su percha de hombre maduro recio, vertical y respetable (sic) a una sucesión espectacular de carreras, persecuciones de coches, tiroteos y demás quincalla pirotécnica por las calles de la ciudad, a ser posible con un trasfondo de exotismo turístico made in film comission.

Los guionistas de Venganza 2 no se han comido demasiado el tarro para volver a poner al bueno de Neeson, guardaespaldas profesional de alto standing, tras la desesperada pista de su mujer e hija, de nuevo en peligro de muerte después de que el padre de una de sus víctimas colaterales de la primera entrega decida vengarlo con las mismas armas del secuestro y la extorsión.

Megaton y sus chicos (conductores, stunt men, maquinistas, etcétera) se lo pasan pipa alterando el orden público en las calles y tejados de Estambul, mientras que nosotros, exhaustos y poco crédulos, luchamos por acomodarnos en la butaca en posición de descanso sin demasiado éxito.